El portero vigués, que la temporada pasada tuvo mucho que ver en el triunfo del Alcoyano ante el Real Madrid, paró dos penaltis en la última eliminatoria
15 dic 2021 . Actualizado a las 22:06 h.El Alcoyano sigue con su idilio en la Copa del Rey y frente al Levante ha conseguido prolongar la mística que mantiene en esta competición donde en la pasada edición ya logró eliminar a Huesca y Real Madrid. En esto tiene mucho que ver José Juan. El portero vigués se convirtió en héroe en la tanda de penaltis tras detener dos de ellos al conjunto granota. El Alcoyano pasa a la siguiente ronda de la Copa del Rey y el gallego ha vuelto a ser el protagonista.
A sus 42 años, llamó la atención del Celta hace más de 20 cuando militaba en el extinto Club Deportivo Ourense. En el conjunto celeste coincidió con Iago Aspas y Borja Oubiña. La expulsión de Cavallero y la varicela de Pinto le hicieron debutar con el conjunto vigués en Primera División ante el Racing de Santander. Tenía 23 años. Aún así, José Juan necesitaba minutos y el Celta no podía ofrecérselos, así que volvió de nuevo a Ourense. Su buena actuación le hizo recibir la oferta del Ciudad de Murcia.
Allí comenzó un periplo entre el fútbol murciano y el granadino, que lo llevó también a militar en el Granada 74, el Águilas y acabar firmando por el Granada, que por entonces jugaba en Segunda B. A la sombra del chantadino Roberto pasó tres campañas. A ascenso por año hasta alcanzar de nuevo la cima del fútbol español. Su última temporada fue un suplicio. José Juan no jugaba y el mal fario de las lesiones se había cebado con él.
Su contrato expiró y José Juan pasaba el verano en Albacete, a la espera de que el teléfono sonase. Y llegó una llamada desde Lugo. Diego Rivas se había marchado y necesitaban un recambio. Otro ascenso le esperaba, el que llevó al equipo de Setién a la categoría de plata en la que todavía habita.
En el 2017, cuando finalizó su vínculo con Lugo, lo querían retirar. Cumplía 38 años -nació el día de fin de año- y entendían que se le acababa el tiempo. El Elche le ofreció un contrato y para allá se fue dos temporadas. Jugó quince partidos. Pero la sombra de la retirada volvía a aparecer. Era el verano del 2019 y José Juan cumplía los 40. Pero se resistió a abandonar. El Alcoyano, en Tercera, le ofreció otra prórroga. Quería regresar a la división de bronce. La competición se paralizó con la crisis del covid, pero la federación optó por ascender a los cuatro equipos que tenían que disputar la repesca. El fútbol le guardaba todavía la propina.
En enero de este año se vestía de héroe en Alcoy. El meta vigués había logrado apear al Real Madrid de la Copa del Rey. Ayer lo volvió a hacer eliminando al Levante. Una épica que engrandece todavía más la figura del veterano portero.
