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Con sus vídeos, cuida la imagen de deportistas como Reguilón y Ana Peleteiro
23 feb 2022 . Actualizado a las 05:00 h.En Monte Alto pocos lo saben, pero además de Luis Suárez Miramontes, hay otro vecino que sabe cuánto pesa un Balón de Oro. Se trata de Yeray Longueira (A Coruña, 1995) y, pese a las buenas dotes con la pelota que mostró en el Orillamar y Sporting Coruñés, entre otros, no lo ha levantado por su fútbol. O sí. Porque en la gigantesca dimensión que abarca hoy por hoy este deporte, su labor es imprescindible. Es director creativo de comunicación y márketing para deportistas. Dicho de otra forma, Yeray es el creador de los montajes audiovisuales que luego vemos en la televisión o, más comúnmente, en las redes sociales de futbolistas como Luka Modric y Sergio Reguilón.
Su manejo con la cámara viene de lejos. De adolescente, mientras estudiaba en Adormideras, se compró una GoPro que funcionó de chispa para avivar una pasión que rellenó de conocimientos gracias a Youtube, al que reconoce «deber la vida» por la oportunidad que le concedió de ser autodidacta desde los 15 años. Comenzó resumiendo sus viajes a Tailandia y encontró trabajo en una productora. Pero no le llegaba. «Se me quedaba un poco pequeño», señala. Por lo que se fue a Madrid, donde estudió Relaciones Públicas mientras trabajaba de dependiente en Decathlon, El Corte Inglés y Hawkers. Hasta que le llegó la oportunidad de su vida, y eso que él ni lo sabía.
«Mi jefe actual preguntó a uno de mis profesores por un chaval que controlase de photoshop y redes para diseño gráfico y fui uno de los cuatro seleccionados. Se iba a quedar con el primero, pero un compañero le convenció de que nos entrevistase a todos y le acabé gustando más yo». Era octubre del 2018 y, dos meses después, ya tenía a Luka Modric recibiéndole en su casa para crear contenido junto al Balón de Oro que le acababan de entregar. «El primer año, mientras estaba en tercero de carrera, ya trabajé con Lucas Vázquez y Modric y recorrí casi todos los estadios de Primera. Tenía que pellizcarme para asegurarme de que no era un sueño», cuenta Yeray, que hace unos meses dejó la agencia de márketing Arowana Sports para enrolarse, junto a Borja Couce en el nuevo proyecto por el que este último ha apostado: BC26, donde está recogiendo los frutos de un proceso que, pese a la felicidad, fue muy duro. «A veces tenía que comer en el metro para poder trabajar y estudiar a la vez. Y todo siendo becario, que no ganas ni el sueldo mínimo».
Hoy se levanta todos los días con el convencimiento de ser una de las personas más afortunadas del mundo. Además, su labor, que él no sabía ni que existía antes de llevarla a cabo, es cada día más demandada por marcas, agencias y deportistas, «porque ven los beneficios que les aporta tener una buena imagen», advierte sobre un mundo que le ha sorprendido por su humildad y sencillez. De hecho, ya ha traspasado la barrera profesional, yéndose de vacaciones con el mismo Sergio Reguilón, al que convenció de ser uno de los primeros futbolistas con Tik Tok. En las últimas semanas, ha comenzado a trabajar con Ana Peleteiro, de la que también habla maravillas y con la que apaga, brevemente, su morriña.