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Tres meses de suspensión al entrenador del Silva alevín por una supuesta agresión a un árbitro menor

La Voz

DEPORTES

La medida es cautelar mientras no resuelve la justicia ordinaria por la vía penal

21 abr 2022 . Actualizado a las 10:10 h.

El Comité de Competición de la Federación Gallega de Fútbol decidió suspender cautelarmente la licencia del entrenador del Silva alevín durante tres meses, como máximo, después de que el acta del encuentro contra el Calasanz (0-2) recogiese una supuesta agresión al árbitro, menor de edad.

El partido, correspondiente a la jornada 16 del grupo A Coruña G. C. de la Segunda Galicia de fútbol 8, disputado el 9 de abril terminó con un tumulto, que el árbitro recogió así en el acta: «Una vez finalizado el encuentro, y cuando me dirigía a mi vestuario encontrándome aún sobre el terreno de juego, se acerco hacia mí el entrenador del Silva SD, realizando objeciones hacia mi actuación arbitral, con palabras tales como: ‘Eres muy malo, no pitas una...'. Por este hecho, le comunico verbalmente que está expulsado. No le mostré la tarjeta roja durante el encuentro, porque estaba nervioso y temí por mi integridad fisica. Una vez en la zona de vestuarios, se acercó a mí y me dijo las siguientes palabras: ‘A mí también me han insultado. Lo tengo todo grabado'. Después de esto, me golpeó con la mano abierta de forma enérgica en la espalda, causándome molestias. Este hecho sucedió en presencia de mi madre, de los miembros de las instalaciones y miembros del público».

El árbitro presentó un parte de lesiones y, a tenor del informe médico y en base al artículo 2.2 del Reglamento Disciplinario, el Comité de Competición está obligado a dar traslado del caso al Ministerio Fiscal, por lo que se abre la vía judicial (salvo que ambas partes lleguen a un acuerdo previo) y suspender el procedimiento sancionador hasta que la justicia resuelva. Además, adopta medidas cautelares (la suspensión de la licencia del entrenador hasta que la justicia resuelva, con un máximo de tres meses) tras recibir las alegaciones del Silva y en base al artículo 90 del Reglamento Disciplinario. Si la justicia resuelve que no hubo agresión o establece una sanción temporal, se resarce o se descuenta la parte ya cumplida por el sancionado.

El entrenador del Silva alega que no hubo agresión por su parte, sino unas palmadas en la espalda del árbitro tras verse acorralado por un grupo de padres de jugadores del Calasanz, y también adjunta un parte de lesiones, identificando como agresores a la madre del colegiado (un manotazo y un arañazo) y a un aficionado del equipo rival (un golpe en el hombro).

Por otra parte, el delegado del Comité Técnico Gallego de Árbitros de Fútbol en A Coruña, Rubén Eiriz Mata, condenó los hechos: «Agresiones de este tipo son inaceptables y una vergüenza para la sociedad. No entendemos por qué siempre caen hacia el mismo lado. El fútbol 8 está dirigido por menores de edad porque es una etapa formativa para todos. Este árbitro llevaba cinco meses pitando. Tiene derecho a equivocarse, como todos, del mismo modo que toleramos el error del niño que juega, porque forma parte del deporte. Hay que reflexionar sobre estas actitudes».