La AFE pide al CSD una investigación por el presunto espionaje de Rubiales

Amador Gómez COLPISA

DEPORTES

AFE

Aganzo acusa al presidente de la RFEF de llevar a cabo una intolerable persecución y anuncia acciones legales por prácticas de dudosa legalidad

17 may 2022 . Actualizado a las 16:55 h.

La Federación Española de Fútbol (FEF) desmintió este martes, «con total rotundidad», que Luis Rubiales encargase a una agencia de detectives espiar al presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), David Aganzo. Sin embargo, el sindicato de jugadores anunció que solicitará al Consejo Superior de Deportes (CSD) que abra una investigación para determinar si el presidente de la FEF ha cometido una infracción «grave o muy grave» de la Ley del Deporte que pudiera derivar en la destitución o inhabilitación temporal de su cargo. La AFE y su presidente también adoptarán medidas legales contra Rubiales, además de trasladar «su preocupación y repulsa a UEFA, FIFA y FIFPro (sindicato internacional de futbolistas), al entender que podría haber alguna responsabilidad penal o disciplinaria apelando a sus respectivos códigos de conducta».

«Consideramos que episodios como este deben ser reprobados y las personas que los protagonizan deberían estar fuera del ámbito del deporte», estima la AFE, según la cual el presidente de la FEF está llevando a cabo «una intolerable persecución al máximo representante del colectivo de futbolistas de nuestro país y a un sindicato en el que siempre debe prevalecer su independencia». «En AFE entendemos que debe actuarse con contundencia frente a este tipo de actuaciones por parte de una institución que actúa por delegación pública y que, por tanto, tiene una proyección de los poderes públicos, que deben intervenir para salvaguardar el buen nombre del fútbol y de una institución de la importancia de la FEF», reclama el sindicato de futbolistas a través de un comunicado público después de que El Confidencial haya publicado que Rubiales contrató a unos detectives para espiar a Aganzo. Supuestamente, se trataría de una maniobra del máximo mandatario de la FEF para provocar la marcha de Aganzo mediante una moción de censura de los afiliados al sindicato.

«AFE entiende que con este tipo de maniobras, más parecidas a prácticas de dudosa legalidad, se pretende coaccionar e intimidar su papel, que en este caso desempeña en el ámbito del fútbol y en la defensa de sus afiliados y afiliadas», añade el sindicato de jugadores. «En este caso no hay ningún interés legítimo para contratar los servicios de una empresa de detectives con la intención de investigar a su presidente y sí un interés espurio para dañar su imagen, su reputación y la del sindicato al que representa», lamenta la AFE. El sindicato que preside Aganzo recuerda que la FEF ya filtró unos audios grabados sin permiso, por lo que la Agencia Española de Protección de Datos multó al organismo federativo con 200.000 euros. «Es injustificable una investigación con detectives privados encargada desde la FEF con claro ánimo de intervenir en el normal desarrollo de la vida diaria del sindicato», añade la AFE.

«Campaña de acoso personal»

La FEF, sin embargo, defiende que el mismo medio de comunicación que desveló los polémicos audios entre Luis Rubiales y Gerard Piqué sobre la Supercopa de España «ha vuelto a construir un relato intencionadamente falso vinculando al presidente hechos con los que nada tiene que ver». «'El Confidencial' vuelve a demostrar que su único objetivo es seguir nutriéndose de información robada y denunciada para ampliar su campaña de acoso personal contra el presidente de la FEF y su equipo. Lamentamos desde la FEF que una vez más El Confidencial publique una noticia falsa y sin contrastar con el único fin de dañar al presidente y su equipo», escribe el organismo federativo, que recuerda que Rubiales fue presidente de la AFE entre 2010 y 2017, afiliado desde hace más de dos décadas, «y como tal conversó sobre la inquietante situación del sindicato con otros futbolistas y ex futbolistas». «Los comportamientos de David Aganzo acabaron por confirmar la preocupación existente entre un nutrido grupo de afiliados con la imputación del actual presidente por soborno a un funcionario público con el objetivo de obtener ilegalmente documentación reservada del sindicato Futbolistas On, una cuestión que está en manos de la justicia», recuerda la FEF.

«Luis Rubiales ha sido, es y será militante activo de AFE. Cuando conoció el posible soborno denunciado por el exempleado de AFE Antonio Saiz y despedido por hacerlo, colaboró con quienes también estaban indignados por esa posible práctica. Miembros de la junta de AFE y otros destacados militantes contactaron con Rubiales, que se prestó a ayudar y colaborar en busca de que aflorara la verdad con el fin de propiciar un cambio de rumbo y de dirección en el organismo, siempre en el marco de su filiación sindical y amparado por la ley y nunca con hechos como los que hoy 'El Confidencial' pretende atribuir al presidente de la FEF», insiste la Federación Española de Fútbol.