Apuntan a repintar las butacas de rojo si no se respeta la tradición en la reforma
16 sep 2022 . Actualizado a las 17:45 h.El estadio de O Couto fue inaugurado a finales de agosto de 1948 y es uno de los feudos míticos del balompié gallego, gracias sobre todo a las hazañas que allí firmó durante más de sesenta años el desaparecido Club Deportivo Ourense. Pese a distintos lavados de cara, también es una vetusta edificación, propiedad de la Xunta de Galicia, que no se acerca al nivel de exigencia de las instalaciones existentes en otras ciudades vecinas. Fue uno de los motivos por los que el ejecutivo autonómico programó, con vistas a este año, una inversión de 1,8 millones de euros para una reforma integral que concluirá la primera fase el próximo febrero.
El proyecto ya provocó distintas quejas, por causas que van desde el mal estado del césped (no incluido en este capítulo inicial de los trabajos), al remplazo de las añejas butacas con la desaparición de las tonalidades rojas y azules, identificativas del citado CD Ourense. La retirada de los colores tradicionales del estadio ha irritado a la afición de la UD Ourense (heredera de la entidad vermella), cuya directiva emitió un comunicado expresando su malestar por la medida, ya que considera que el rojo y el azul forman parte de la historia y el sentimiento ourensanista.
En ese sentido también se manifestó Modesto García, el que fue primer presidente de la UD, fundada en el 2014, cuando representó a los abonados en la nueva estructura deportiva, con la idea clara de mantener el legado del club que acababa de desaparecer por liquidación de la sociedad anónima. «Es impresentable, este estadio fue del CD Ourense y para el CD Ourense. Quienes lo dejaron morir no se cortaron en formar parte de las celebraciones de sus 60 años de historia, y ahora vuelven a tomarnos el pelo con una medida que no guarda ninguna sensibilidad con respecto a los símbolos del club».
García Puga añade también que la decisión es, además, impopular. «Va a traer cola, ya hemos oído y leído en redes que hay aficionados dispuestos a pintar su butaca para mantener en el estadio los colores del club, no tiene sentido provocar así a la gente».
Es similar la línea argumental de Rubén Conde, otro de los seguidores que llegó a implicarse en la directiva de la sociedad que tomó el relevo: «A verdade é que son cousas que non nos sorprenden, porque xa tivemos problemas para levantar o monolito de Club Deportivo Ourense. Agora queren substituír o vermello polo azul Xunta, que ademais coincide coa cor doutro equipo que xoga no estadio. A instalación ten outros moitos problemas, pero non deixa de ser un novo agravio comparativo máis, e xa os temos interiorizados».
El proyecto de la Secretaría Xeral para o Deporte, cuyos trabajos comenzaron en julio, también ha sido criticado por formaciones políticas como el BNG, en especial por el evidente mal estado del terreno de juego, como pudo comprobarse el pasado fin de semana en el inicio de la Segunda RFEF, con el partido que allí disputó el Ourense CF. El próximo sábado jugarán en O Couto tanto la UD Ourense (Tercera RFEF), como el Arenteiro (Segunda RFEF), que no puede contar con su campo.
«Es una falta de respeto a la memoria del club»
Mientras la afición ourensanista espera que comience la campaña de su retorno a Tercera RFEF, la cúpula rectora de la UD Ourense se hizo eco del malestar de sus seguidores, algo que un hombre muy vinculado al movimiento de las peñas del club, como es el citado Modesto García, recalcaba en su valoración: «Es un detalle más de la falta de sensibilidad que han tenido los políticos a la hora de referirse al Ourense, y esta es una falta de respeto más a la memoria de un club que siguen recordando miles de aficionados».
Más allá del tema de los colores en el graderío, buena parte de la hinchada de la UD Ourense tampoco está muy satisfecha con el nuevo proyecto para O Couto. Rubén Conde recuerda que el Arenteiro carballiñés coincidirá con los ourensanistas este mismo fin de semana: «É un club veciño que non ten culpa desta polémica, pero se eles veñen, porque o seu campo non está en condicións, quizais nós deberíamos ir a Verín, porque o noso tampouco está ben».
En principio, no está previsto suspender o aplazar partidos en O Couto, porque la constructora tiene instrucciones de mantener disponible una grada u otra, pero los trabajos en el terreno de juego están planificados para comenzar el próximo mes de mayo.
