El técnico burgalés cree que apostar por mantener el bloque le da cierta ventaja
03 ago 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Entre llamada y llamada, vídeos, cursos y videoconferencias, Diego Epifanio (Burgos, 1978) trata de disfrutar del verano el poco tiempo que le queda. La ventaja que tiene este año es que, a falta de dos meses para iniciar la competición, la plantilla está prácticamente confeccionada. Sólo le falta por firmar un base (al 90 % no seguirá Filipovic) y un alero alto. El resto del equipo ya es conocido. Por eso, aguarda con ilusión el regreso a los entrenamientos porque cree que el comienzo de la LEB Oro será mejor que el del año pasado.
—¿Qué indica esa apuesta por la continuidad de siete jugadores, algo que no es habitual en esta categoría?
—Pues indica que, pese a no haber logrado el objetivo ansiado del ascenso, confiamos en el bloque que hicimos el año pasado, le queremos dar continuidad y creemos que eso nos va a beneficiar a la hora de afrontar la siguiente campaña. Es muy importante que los jugadores se conozcan y que también conozcan al entrenador. Ahí llevamos algo ganado respecto a otros rivales y a nuestra plantilla del año pasado. En el anterior ejercicio llegaron muchos nuevos, yo también debutaba aquí y es complicado en poco tiempo componer todo el puzle.
—Se les escaparon varios partidos por no estar conjuntados. ¿Significa lo de este año que van a por el primer puesto desde el principio?
—Significa que queremos estar a un alto nivel durante toda la temporada. No separamos el inicio, del medio, del final. Estudiantes y Burgos van a ser los dos gallitos y falta por ver Fuenlabrada, pero con lo que está anunciando, creo que va a estar también ahí arriba. Luego habrá otro grupo como Valladolid, Lleida, Alicante, Castellón, nosotros... El nivel de la Liga este año será aún mayor, pero vamos a estar ahí. De eso no tengo dudas. Ahora, hay que ver en qué estado de forma llegamos a cada momento.
—¿Algo de lo que tomar nota de la desilusión del año pasado?
—No. Hicimos la mejor clasificación regular de la historia del club y luego nos eliminaron en los play-offs. Es que hay mucha igualdad y ahí no estuvimos lo finos que hubiésemos querido. ¿Qué cambiamos este año? Pues ser un equipo más compenetrado desde el inicio. Que todos los jugadores sepan nuestra filosofía. Porque, además de los siete que se quedan, Goran [Huskic], que acabamos de fichar, me conoce de haber estado tres años conmigo en Burgos. Luego, no cambia nada. Tenemos que pelear por estar ahí. Hay presupuestos más altos, pero lucharemos.
—Hábleme de Huskic y McDonnell
—El primero es un hombre muy generoso con el balón en las manos. Juega tanto en el poste bajo como en el alto y es el típico jugador que hace mejores a sus compañeros. Nos va a permitir otro registro para poder jugar, con mucha capacidad de pase. Además, me conoce muy bien a mí y la competición. En el caso de McDonnell, puede actuar de cuatro y de tres. El año pasado fue el que mejor porcentaje de tiro de tres tuvo en la categoría. En las situaciones de rebote nos va a ayudar mucho porque es muy activo y permitirá diferentes variantes defensivas. También conoce la competición.
—Faltarían un base y un alero alto, ¿no?
—Sí. Son las dos posiciones en las que todavía no hemos renovado o cerrado algo. Lo que estamos mirando también tiene mucho nivel, pero siempre dentro de nuestras posibilidades, pues hay clubes como Estudiantes o Burgos con los que económicamente no podemos competir.
—¿Por qué el adiós de Javi Vega?
—Es un hombre muy querido en el club. Un gran profesional. El año pasado nos ayudó mucho a nivel de vestuario. Cuando empezamos con las renovaciones nos encajaba. Luego, hicimos un movimiento y encontramos un perfil parecido. Ahí su rol cambiaba, le llegaron otras opciones y entiendo que no esperara más.