Cosecha su primera derrota como local ante el Fuenlabrada en un partido que no consiguió llevar nunca la batuta
03 dic 2023 . Actualizado a las 22:13 h.La primera derrota llegó a Riazor. Era el tercer partido del Leyma en tres días, y el esfuerzo físico se vio reflejado en la cancha. El equipo no fue reconocible hasta los últimos minutos del choque, y eso, sumado al poco acierto anotador que desplegó, concluyó con el primer tropiezo como local y el cuarto de la temporada.
Diego Epifanio apostó por un quinteto renovado, obligado por la saturación de partidos de los últimos días, y la baja de Olle Lundqvist.
El Fuenlabrada se hizo con la primera posesión y clavó los primeros dos puntos en apenas segundos. Al Leyma le tocó remar en contra durante todo el primer cuarto. El conjunto madrileño no titubeó bajo el aro para comenzar mandando, mientras a los naranjas les tocó pelear también contra sí mismo y su bajo porcentaje en tiros de tres. Mientras, el Fuenla seguía a lo suyo, sumando un +6 de ventaja en los primeros compases. El Leyma acusaba el cansancio y lo pagaban con pérdidas poco habituales y errores defensivos. No estaba a gusto en la cancha. Epi paró el partido, pero no encontró la manija para devolver la confianza al grupo. Toda la fortuna que le faltaba a los coruñeses, la tenía en conjunto madrileño. Impecable en ataque y muy sólido en defensa. Mientras, Beqa sumaba puntos y conseguía mantener el barco naranja flote.
En el segundo cuarto, la grada apretó. Los necesitaban. El empuje fue tal que la igualada llegó al marcador (25-25) gracias a la primera jugada bien ensamblada que culminó McDonnell bajo el aro. El Leyma se reconocía. Álex Hernández devolvió el acierto desde la línea de tres para poner al equipo por delante por primera vez (28-25). Duró un suspiro. El empuje del Fuenlabrada en las contras le devolvió el mando (38-42) antes del descanso.
El paso por vestuarios no cambió la dinámica. Tres triples del Fuenla dilapidaron lo logrado en el segundo parcial. Epi volvió a parar el juego. Pero el conjunto madrileño, fulminante a la contra, se apoderó del marcador (40-55). La poca capacidad anotadora del equipo naraja se transformó en frustración y espesura en el juego. Un mate de Diagne volvió a levantar al Palacio. Pero el Fuenla se sentía cómodo y desplegaba calidad en cada ataque ante la endeble defensa naranja (53-66).
En el último cuarto, no le quedaba otra al Leyma que apretar los dientes para dar la vuelta a un marcador que seguía creciendo en contra (55-71). Tres de tres en tiros libres de Jakovics alimentaron el espíritu de la remontada. Una fabulosa jugada del base letón que acabó culminando Diagne, los mantuvo con vida, y un triple de Barrueta los acercó al milagro (68-78). Restaban cuatro minutos para el pitido final. Pero el poco acierto anotador que acumuló en gran parte del partido pasó factura. Hubo reacción del Leyma, pero no llegó a tiempo. El equipo naranja encaja su primera derrota como local y paga caro la acumulación de partidos.