Deputación y Xunta aúnan fuerzas por un Gran Fondo Ézaro que rebaja dureza y renueva tramos
DEPORTES
Alejandro Valverde estará en el pelotón que coronorá el ya famoso mirador el domingo 7 de julio
24 may 2024 . Actualizado a las 01:45 h.El Parador de Santiago de Compostela acogió la presentación de la novena edición del Gran Fondo Ézaro, que se celebrará el domingo 7 de julio, con un recorrido de 107,2 kilómetros y más de 2.150 metros de desnivel que dieron a conocer en un acto en el que hubo variada presentación institucional. Allí estaba el presidente de la Deputación da Coruña, Valentín González Formoso; el secretario xeral para o deporte, José Ramón Lete Lasa; el diputado de Deportes, Antonio Leira; el alcalde Dumbría, Raúl González; el presidente de la Federación Galega de Ciclismo, Juan Carlos Muñiz y el organizador, Ezequiel Mosquera, además de patrocinadores y colaboradores.
Lete Lasa resaltó la presencia de Alejandro Valverde, el campeón del mundo en el 2018 que el año pasado no pudo acudir por problemas familiares. «É a rampla máis desafiante do ciclismo nacional na que o triunvirato da natureza máis pura formado polo Monte Pindo, o río Xallas e a fervenza do Ézaro se alía cada ano co deporte para construír unha das probas que xa forma parte da mitoloxía galega», señaló el secretario xeral. González Formoso, por su parte, ensalzó el orgullo de que las distintas fuerzas políticas apoyen de manera uniforme una cita que «é o mellor escaparate para mostrar ao mundo as paisaxes máis espectaculares da Costa da Morte». Ambos resaltaron también el poder vertebrador y potenciador de valores que tiene este evento en el que en los últimos años también han participado leyendas como Miguel Indurain, Claudio Chiapucci, Alex Zülle, Tony Rominger, Pavel Tonkov, Marino Lejarreta, Joseba Beloki, Samuel Sánchez, Roberto Heras o un Álvaro Pino que también estuvo presente.
Gigantes del deporte de las dos ruedas con los que rodarán ciclistas de todos los niveles, pues ese es uno de los sellos diferenciadores de esta cita que recorrerá los Concellos de Dumbría, Carnota, Muros, Outes, Mazaricos y Cee antes de enfrentarse a la subida al mirador de O Ézaro, con su temida rampa de casi un 30 % de desnivel. «O cemento máis famoso do mundo», como lo definió Ezequiel Mosquera, organizador principal del evento con su empresa Eme Sports. Previamente habrá otros dos puertos, el Alto do Arestiño, de primera categoría, y el Alto da Ruña, de tercera. «É para todos, pero non é para calquera», concluyó Lete Lasa sobre este Gran Fondo, que reúne cada año unos 1.000 ciclistas.
El Gran Fondo rebaja dureza, amplía miras y renueva tramos
Han pasado doce años desde aquella primera vez que La Vuelta encumbró O Ézaro y visibilizó desde lo alto una meca para el ciclismo nacional e internacional. Un lugar de peregrinaje a pedales que se venera cada verano con el Gran Fondo Ézaro, que el domingo 7 de julio celebrará su novena edición con un único recorrido de 107,2 kilómetros y 2150 metros de desnivel positivo, tramos renovados y dureza rebajada. «Eu dicíalles que ían morrer de éxito por querer facelo ao mesmo tempo que La Vuelta, pero ao final sacáronme os cartos e vese que segue con moita saúde», comentó Carlos Soriete, exgerente de Ferroatlántica. «Isto foi un antes e despois. Onte paseando polo Ézaro vin chegar cinco autobuses en media hora, e diso ten moita culpa o Gran Fondo», le siguió el exalcalde Pequeño. Ambos estuvieron en el acto de presentación.
Sobre la exigencia de la prueba, que tendrá un único recorrido de 107,2 kilómetros, hablaron el campeón de La Vuelta en 1986 Álvaro Pino y el profesional Samuel Blanco. «É unha subida única, cunha dureza que só lembro no Mortirolo», confesó Pino. Este año, no obstante, la dificultad se reduce con la intención de volver a ser una referencia en cuanto a la combinación de deportistas de alto nivel y ciclistas amateur. «Habrá un elenco de leyendas, pero sobre todo será en un paraje de leyenda, ese olimpo celta que es el Monte Pindo. El mundo entero descubrió la Costa da Morte gracias al ciclismo» destacó Lete Lasa.
Estará Valverde y todo apunta a que volverá Gómez Noya a un recorrido que repite hacia Esteiro
La presentación volvió a ser el lugar elegido para desvelar el mapa de la prueba. Como el año pasado, la organización decidió ofrecer una única distancia, de 107,2 kilómetros con más 2.150 metros de desnivel, y, otra vez, tirará hacia el sur, llegando hasta Esteiro. Hasta allí pedalearán por la carretera general tras salir de la Cascada de O Ézaro. Serán unos 50 kilómetros a ritmo uniforme por un entorno privilegiado, hasta alcanzar el primer puerto, el Alto de Arestiño, de primera categoría, por donde bajan las famosas carrilanas. De esa subida se dirigirán al Alto da Ruña (3ª categoría), antes de que los velocistas tomen protagonismo hacia Dumbría, desde donde bajarán a Brens, preludio del regreso a O Ézaro para enfrentarse a la subida al mirador, con las temidas rampas que rozan el 30% de desnivel.
Un lugar único para disfrutar de un deportista único, Alejandro Valverde, el campeón del mundo (2018), que no pudo estar el año pasado y que sí visitará a la Costa da Morte en esta edición. Además, todo apunta a que regresarán Javier Gómez Noya o Samuel Sánchez, que se impuso el año pasado.
Ezequiel Mosquera: «Sempre intentamos innovar no percorrido»
Ezequiel Mosquera informó de que el ritmo de inscripción va según lo previsto, porque ahora «moita xente espera a última hora». El organizador resaltó el hecho de que cada año varíen el recorrido para seguir atrayendo ciclistas. «O ano pasado xa incluimos a zona da baixada das carrilanas e gustou moito, pero dende alí, agora, metemos a versión fácil do Alto do Ruña para que a xente chegue con folgos á subida do Ézaro, que é do que se trata», dijo. «É unha proba aberta a todo o mundo, co agasallo de poder compartir pelotón cos mellores», comentó a La Voz.
Raúl González: «É un evento para toda a Costa da Morte»
El alcalde de Dumbría, Raúl González hizo hincapié en la repercusión comarcal que tiene el Gran Fondo. «Que veán mil corredores coas súas familias supón un fluxo económico moi importante, pois ocupan hoteis dende Muros ata Laxe», explicó. «Temos moi asumido o traballo de organización pero iso non quere dicir que non se poida mellorar. O presidente da Federación díxonos que a edición que máis lle gustou foi a do ano pasado polos cambios que se fixeron no trazado e no transcurso, e iso fala as claras desta evolución», dijo.