El californiano iguala el récord «birdies» del torneo en un solo día y llega al desenlace con tres golpes de ventaja sobre McIlroy, Pavon y Cantlay
16 jun 2024 . Actualizado a las 02:14 h.Bryson DeChambeau dio este sábado un vuelco al US Open. El pegador californiano, que comenzó el día un golpe por detrás del sueco Ludvig Aberg, abrirá este domingo la última jornada como enemigo a batir (canal Golf de Movistar Plus +, 17.30). A sus 30 años, convertido en gran abanderado del LIV Golf, mientras el resto de jugadores del circuito de capital saudí decaen cuando se enfrentan a los mejores en los grand slams, falló en el hoyo 4, pero después de ese bogey reaccionó con una cascada de birdies en el 5, 7, 10, 11 y 14, mientras la mayoría sufrían los rigores del campo número 2 de Pinehurst, en Carolina del Norte. Solo volvió a tropezar en el 16, con un doble bogey, cuando se había llegado a ver con cuatro golpes de ventaja sobre sus tres más inmediatos perseguidores. Y a ese apuro contestó con otro acierto en el 17. Así que llega a la ronda definitiva después de entregar una tarjeta de -3 y totalizar -7, con tres impactos de ventaja sobre Rory McIlroy, Matthieu Pavon y Patrick Cantlay.
Aberg se había acostado el viernes como líder, en busca de convertirse en el cuarto jugador más joven en ganar el US Open en los últimos 50 años, después de Jordan Spieth, Rory McIlroy y Tiger Woods. Y a sus 24 años, y con solo 12 meses como profesional con una progresión fabulosa —hasta ser hoy el número 6 del ránking mundial— manejó las primeras complicaciones de Pinehurst con solvencia. Hasta que el día del movimiento empezó a agitar la cabeza. El primero en apretarle fue Matthieu Pavon, el francés que persigue otra proeza. Convertirse en el segundo jugador galo en ganar un grand slam, como hizo Arnaud Massy en el Open Británico de 1907. Después de siete calles, ya había adelantado a Aberg, que todavía iba a sufrir más tarde un colapso con un triple bogey en el 13.
Por detrás se unieron poco después al francés Tony Finau y DeChambeau, con Rory McIlroy muy cerca. Ardía el US Open, con un campo que obligaba a los aspirantes a explotar su creatividad. O la fiabilidad y la regularidad del juego, como hizo el bombardero DeChambeau, que llegó a verse como líder con cuatro golpes de ventaja.
Este domingo, después de igualar el récord de birdies en una vuelta del US Open, con seis, abrirá la jornada decisiva en busca del segundo grand slam de su vida. Sería una pequeña reivindicación para la representación del LIV. Ausente Rahm por una infección en su pie izquierdo, solo otro jugador del circuito de capital saudí, Tyrrell Hatton, figura entre los 20 primeros.