A pesar de la muy buena puesta en acción del Leyma Básquet Coruña, con un buen primer cuarto donde los altos porcentajes de tiro y las buenas lecturas del bloqueo directo central hacían que los coruñeses dispararan la ilusión, Joan Peñarroya llamó a filas a sus soldados y se inició el segundo cuarto con un +10, que tiene que parar Epifanio con tiempo muerto, pero el aviso ya estaba encima de la mesa y el físico del Barcelona comenzó a imponerse al de los naranjas.
La defensa del bloqueo directo ya nos llevaba a 9 metros del aro, la actividad de manos por parte de los exteriores de los azulgranas hacía inútiles las continuaciones de nuestros pívots, lo que hacía darle la vuelta al marcador y llegar a un 48-42 al descanso, siendo el rebote ofensivo de los visitantes lo que amortiguó que la diferencia no fuese a más.
El plus de energía que le meten al inicio del cuarto los locales hace que en cada acción de falta vayan a la línea de tiros libres. Este plus fue inversamente proporcional a los porcentajes de tiro del Leyma y un parcial de 10-0 rompió el encuentro definitivamente.
A partir de ahí, el conjunto azulgrana manejó con maestría el encuentro, buscando el 1x1 en movimiento hacia el aro, lo que le hacía visitar mucho la línea de tiros libres (41 intentos al final del encuentro con un 75 %). Esto llevaba como consecuencia muchos parones, que beneficiaban la recuperación y la explosividad del juego ofensivo desplegado por los catalanes. Cabe destacar también el trabajo de los locales cerrándole las opciones de rebote al equipo herculino, siendo el primer encuentro que Leyma no gana en esta faceta estadística.
Necesitábamos que muchos jugadores naranjas estuvieran muy por encima de su nivel de juego y muy fluidos, pero el trabajo de los culés no dejo que entráramos en partido. El aspecto físico fue inclinando la balanza a cada minuto que pasaba.
Toca hacer un llamamiento desde ya para que las gradas del Coliseum estén abarrotadas el próximo domingo a las 17.00 para aumentar el balance de victorias, contra La Laguna Tenerife, pues seguramente el mantenimiento de la categoría pase por las victorias como locales.