El entrenador del Burela FS explota contra el catastrofismo por la marcha de Pescados Rubén: «Estoy cansado de que me den el pésame»

DEPORTES

Pepa Losada

David Rial reivindicó el «potencial humano y deportivo» del club para mirar con optimismo al futuro tras el 2-2 frente al Noia: «El puto dinero no es lo importante, lo importante es cómo se hacen las cosas»

05 ene 2025 . Actualizado a las 13:34 h.

No hay mejor promoción para el Burela FS que lo que cada sábado se ve en el Vista Alegre. Una grada entregada, un equipo femenino admirado en el mundo entero y otro masculino que no se achanta contra nadie en la élite del fútbol sala. A esa idea se agarró David Rial para lanzar un mensaje reivindicativo, harto de la «nube negra» que envuelve al club tras la salida de Pescados Rubén como patrocinador principal, en la rueda de prensa posterior al 2-2 frente al Noia Portus Apostoli.

«Creo que el fútbol sala no es para nada importante con respecto a nuestro club en estos momentos, entonces no tiene mucho sentido que hable de absolutamente nada de eso. Vivimos con una nube negra encima por nuestra situación y hoy (por el sábado) hemos hecho un partidazo, pero mañana saldrá que Malaguti se va, que Meira se va, y volveremos a la misma mierda, a que esto se deshace. Nos estamos haciendo mucho daño», comenzó el entrenador santiagués, de 33 años, tras dar ánimos al rival, que continúa colista sin ganar, y aplaudir una fiesta del futsal gallego que «ojalá se pueda ver muchas veces más en Primera».

«Estoy cansado de que me den el pésame. No puede ser que la gente piense que voy a bañarme a A Marosa porque no tengo agua en casa o que me den velas para que no gaste luz. Si el mensaje del club, el mío, la plantilla, el pueblo y la prensa es ese, en 10 días cerramos el candado y lo tiramos al Cantábrico», razonó Rial, que también reveló que vivió «situaciones de impagos peores que la actual en este club» desde su llegada en el verano del 2022.

«Vivimos un contexto superdébil en la Primera División española. Somos la plantilla más corta y el presupuesto más bajo. Si seguimos con este mensaje nos acabarán matando. A las mismas noticias yo les veo la parte positiva: el club ha dicho que tiene el dinero garantizado para nosotros. Crezcamos desde eso», añadió el técnico naranja.

Durante más de cinco minutos de intenso discurso, puso en valor que tienen «el mejor equipo femenino del mundo» y el trabajo de sus hombres como grandes alicientes para que alguien realice una apuesta económica por el Burela FS: «Tenemos 14 puntos, los mismos con los que el equipo desciende hace tres o cuatro años. No voy a hablar de que aquel equipo sea mejor o peor, pero puedo decir que ahora tenemos un cuarto o un quinto de ese presupuesto. El puto dinero no es lo importante, lo importante es cómo se hacen las cosas, y este club tiene un potencial humano y deportivo de la hostia. Lo digo porque es lo que veo y siento este club como nadie porque me lo ha dado todo».

«Tenemos 14 puntos, los mismos con los que el equipo desciende hace tres o cuatro años. No voy a hablar de que aquel equipo sea mejor o peor, pero puedo decir que ahora tenemos un cuarto o un quinto de ese presupuesto. El puto dinero no es lo importante, lo importante es cómo se hacen las cosas»

«Hay equipos de Primera que están peor que nosotros, con más impagos, pero hay que entender la situación del deporte y que a veces los dineros públicos entran cuando entran», relató antes de invitar a «crecer desde lo que tenemos». «No podemos llorar lo que se fue, que ya no vuelve, y es una putada, una desgracia, me da mucha pena por la empresa, por la directiva, por la gente que trabaja, pero valoremos lo que somos y lo que hacemos, porque así vendrá gente, nos verá y pondrá la pasta».

«Quizás el futuro sea más humilde. Si implica recortes, no pasa nada. Que me echen, yo perdono todo lo que se me debe, pero hay que valorar lo que hacemos si queremos que la gente venga a poner dinero», declaró. «Yo sé lo que es estar seis meses sin cobrar y mientras esté aquí este equipo se va a dejar la puta vida», anunció el responsable de una escuadra con seis puntos de margen sobre el descenso y que conserva opciones de entrar en la Copa de España, a cinco unidades del octavo puesto cuando restan dos jornadas para cerrar la primera vuelta.