El Sin Querer juvenil, sancionado con dos partidos a puerta cerrada tras la agresión de un aficionado a un jugador del Imperátor B
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Asimismo, el Comité de Competición y Disciplina sanciona al delegado de campo durante dos meses entendiendo que actuó de forma pasiva «a la hora de evitar los hechos»
20 mar 2025 . Actualizado a las 17:04 h.El Comité de Competición y Disciplina de la Real Federación Galega de Fútbol (RFGF) ha confirmado este jueves la sanción de dos partidos a puerta cerrada para la SD Sin Querer juvenil, del Grupo 1 de A Coruña de la Tercera Futgal, tras los incidentes en el encuentro que enfrentó a los herculinos al Imperátor OAR B (2-3) el pasado 15 de marzo y que dio en la lesión de un jugador del equipo rival tras ser agredido por un aficionado, según indica el acta del partido.
Según el acta arbitral, que define los incidentes como «muy graves», se produjo una «invasión del terreno de juego por un aficionado indubitadamente identificado como de dicho club, siendo nula, negligente y pasiva la actitud del club a la hora de evitar los hechos».
Asimismo, el Comité ha rechazado las alegaciones del Sin Querer, acusando al equipo coruñés de «enervar la presunción de veracidad atribuida al acta arbitral». Confirma, del mismo modo, que la lesión del jugador del Imperátor queda acreditada en base a la prueba videográfica y el parte médico de urgencias.
El Comité también falló sancionar al delegado de campo del Sin Querer con dos meses de suspensión por no evitar los incidentes, incumpliendo «las obligaciones que le incumben y que ello provoque acciones que hicieran peligrar la integridad física de los árbitros, directivos, jugadores o técnicos».
También fue objeto de sanción un jugador del Sin Querer por agresión y posteriores insultos, lo que le valió una suspensión de cinco partidos en total, así como un jugador del Imperátor B, que solo recibió un partido de sanción.
Juan Carlos Vidal, presidente del Sin Querer, defiende que la sanción no es proporcional
Tras la sanción, el Sin Querer, por medio de su presidente Juan Carlos Vidal, defendió que la sanción del Comité de Competición y Disciplina no fue proporcional a los hechos ocurridos. Según la versión del club, tras el tercer tanto del Sin Querer, uno de sus jugadores celebró frente a la grada del equipo local y fue empujado por un jugador del Imperátor B. Tras ese incidente, ambos jugadores se enzarzaron en una pelea y fueron expulsados.
En ese momento, se produjo algún incidente entre jugadores y un aficionado, mientras que el delegado del Sin Querer intentaba separar a los futbolistas. Pese al episodio, el partido todavía se jugó algunos minutos más. Vidal defiende enérgicamente la labor del delegado, que en sus palabras sí se esforzó en evitar que el conflicto fuese a más.
Si bien asume la expulsión del jugador de su equipo, Vidal considera que la suspensión de dos meses al delegado es injusta, así como el cierre al público de dos partidos del Sin Querer. El club afirma, teniendo en cuenta los hechos, que las sanciones son excesivas.