
El militar aprovechó la jornada de ayer para despedirse de las autoridades civiles El jefe de la brigada desconoce cuál será su nuevo destino y no descarta residir en Pontevedra
14 nov 2005 . Actualizado a las 06:00 h.?l pasado 11 de noviembre, el Consejo de Ministros promovió al grado de general de División del Cuerpo General de las Armas del Ejército de Tierra al hasta entonces general de Brigada Vicente Díaz de Villegas y Herrería. De este modo, tras casi cuatro años al frente de la Brigada de Infantería Ligera Aerotransportable, el militar abandona el mando de la unidad con base en Figueirido. Veinticuatro horas después de conocerse el acuerdo del Consejo de Ministros, éste fue refrendado por el ministro de Defensa, José Bono, y el rey Juan Carlos I, y publicado el pasado sábado en el Boletín Oficial del Estado. Durante la jornada de ayer, Díaz de Villegas aprovechó para despedirse de las autoridades civiles de Pontevedra. De este modo, el recién nombrado general de División comunicó personalmente al alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, su nueva situación en el transcurso de una visita protocolaria, que mantendrá también con el resto de las autoridades locales y provinciales. El general se hizo cargo del mando de la Brigada Ligera Aerotransportable a principios del 2002 y se mostró muy satisfecho de esta etapa vivida a nivel profesional y personal. «Yo he puesto todo el cariño que he podido y que he sabido y me han devuelto muchísimo más», señaló. Futuro De Villegas subrayó que la Brilat «es una brigada de respuesta de la OTAN de primera línea, que ha inaugurado misiones en Kosovo, Irak, Afganistán y ahora en Pakistán» y calificó de «extraordinaria» a toda la gente que la conforman. De momento dijo desconocer quien será su sustituto, aunque supone que el Ministerio de Defensa ya debe tenerlo previsto. En cualquier caso, todo parece apuntar a que, de manera provisional, el responsable de la unidad en funciones será el coronel de mayor antigüedad, que está destinado actualmente en el acuartelamiento asturiano de la brigada. Tampoco pudo concretar cual será exactamente su nuevo destino como general de División. Díaz de Villegas agradeció el gran afecto y respaldo social de los pontevedreses hacia la Brilat y abogó por seguir apoyándola. «Son ciudadanos de aquí, dispuestos a ayudar, con una disponibilidad total y absoluta hasta la última gota de la sangre, algo que se dice y como se ha visto es cierto». El flamante nuevo general de División se siente un hombre afortunado y su intención es seguir vinculado a Pontevedra, donde ha vivido muy a gusto. Dijo tener apalabrado «medio ladrillito» para venir cuando pueda e instalarse aquí. «Mi mujer quiere que compre algo y que me haga pontevedrés y a mi me parece una idea estupenda», apuntó.