La sala de fiestas Lennon se despertará el 11 de septiembre de un largo letargo, dispuesta a volver a convertirse en referencia gallega. En los ochenta convirtió a A Estrada en satélite de la movida madrileña. Por ella desfilaron desde Alaska hasta Manolo Escobar. Olé Olé, Mecano, La Unión, Golpes Bajos, Luz Casal, La orquesta Mondragón y Semen up fueron sólo algunas de las bandas que forjaron la leyenda. La sala de fiestas fue una apuesta visionaria del empresario estradense Ramiro Abelleiro Lagos, propietario de Sala Gradín. Abrió en 1981 y arrastró al municipio a jóvenes de toda Galicia atraídos por los carteles de lujo y los sorteos de coches. Seis años depués, la sala se puso en venta. La adquirió la sociedad Bruñire, que reformó el local y le dio vida durante otros 13 años, hasta la apertura de Viceversa (después Tattoo). En el período 2005-2006, Manuel Temes hizo otro intento por resucitar la discoteca, pero no cuajó.