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El restaurante Samaná asume la gestión del Pazo La Buzaca

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

DEZA

El entorno ofrece 40.000 metros cuadrados de jardines y paseos.
El entorno ofrece 40.000 metros cuadrados de jardines y paseos.

La firma estradense explota todo el complejo de Moraña: tanto los salones para eventos como la hospedería y el restaurante, que abrirá a diario

29 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El restaurante Samaná acaba de asumir la gestión del Pazo Hospedería La Buzaca, en el vecino municipio de Moraña. Tras seis meses de arduas negociaciones, la firma estradense ha cerrado un acuerdo de alquiler con la familia propietaria de las instalaciones, que las había abierto al público hace 12 años. El acuerdo conlleva la explotación por parte de la empresa estradense de todo el complejo, tanto del cenador para bodas y banquetes como de la hospedería, que dispone de 13 habitaciones.

Al restaurante Samaná -que el 23 de enero cumplió cinco años de actividad- le interesa especialmente el complejo por sus amplias posibilidades para la organización de bodas, bautizos y comuniones. El restaurante -situado en el número 45 de la calle Gradín- dispone de amplios salones con capacidad para entre 250 y 300 personas. En ellos se organizan todo tipo de eventos. Sin embargo, los propietarios -los hermanos Manuel y José Bascuas- han comprobado que, para ciertos acontecimientos, el cliente demanda espacios abiertos. «Especialmente para las bodas, la gente quiere pazo. Quiere espacios nobles y zonas ajardinadas», explica Manuel Bascuas.

El pazo La Buzaca responde a las expectativas. La capacidad de su cenador ronda las 300 personas, pero además el pazo ofrece 40.000 metros cuadrados de jardines y paseos con encanto. También dispone de capilla consagrada en la que se pueden celebrar ceremonias, torre, palomar, piscina y dos hórreos, uno de ellos acondicionado como comedor.

El restaurante Samaná gestionará además el comedor principal del recinto, que a partir de mayo estará abierto a diario tanto para clientes alojados en la hospedería como para comensales de fuera. Las instalaciones disponen también de una taberna habilitada en una antigua bodega que se está rehabilitando. Desde mayo también se podrá acceder a ella sin estar alojado ni participar en ningún evento.