
La guerra en Ucrania está dificultando la recuperación del sector turístico
13 mar 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Desde marzo del 2020 las agencias de viaje de la zona están luchando contra los elementos para poder seguir a flote y resistir los diferentes envites que aparecen en el panorama internacional. Cuando parecían ver la luz al final del túnel tras la pandemia, la sexta ola rompió con sus planes y obligó a cancelaciones inesperadas. Y ahora la guerra de Ucrania ha vuelto a poner en alarma a un sector que preparaba con optimismo la temporada vacacional de la Semana Santa y la del verano. Aunque por el momento sus efectos no se dejan sentir en cuanto a cancelaciones y descenso en el número de reservas, la coyuntura económica surgida a raíz de la guerra podría suponer el encarecimiento progresivo de los billetes. Asimismo, el conflicto en el este de Europa ya recorta severamente los destinos.
Manuel Ferradás, de Zafiro Tours en Lalín, explica que sobretodo afectará a los vuelos largos. «Compañías internacionales como Fly Emirates o Qatar Airways sí que nos están dando aviso de incrementos de los precios por el carburante. En trayectos largos se van a disparar y en el corto es probable, pero más tarde. A día de hoy no notamos ese incremento», explica. Asimismo, comenta que los clientes no están huyendo presa del miedo, aunque si se interesan sobre como puede afectar el conflicto. «La gente aún no da marcha atrás a sus vuelos, pero si pregunta si habrá algún problema. Aunque honestamente creo que pueden viajar tranquilos», afirma.
En A Estrada, Pelayo Bergueiro, de Viajes Sanpaio, señala que tampoco han tenido cancelaciones y coincide con Ferradás en que los precios de los pasajes de cualquier medio de transporte van a subir. Otro escenario que considera que ocurrirá es la modificación de rutas de cruceros o viajes, escapando de Rusia, Ucrania y su entorno como los países bálticos. «Hay zonas que no se tocan, por ejemplo un crucero por el báltico con parada en San Petersburgo sí que se han cancelado, pero para Nueva York o las Malvinas la demanda es la habitual», comenta Ferradás.
Ambos coinciden también en que aún es pronto para conocer el impacto real de la guerra en el sector, no obstante, se muestran un tanto optimistas en cuanto a la percepción de que los clientes tienen ganas de salir a viajar.
Los cruceros y las lunas de miel vuelven a retomar el ritmo previo a la pandemia
Las agencias de viajes de la zona constatan que entre las buenas noticias de los últimos meses está el ritmo de reservas para cruceros y lunas de miel, buques insignia de estos negocios. En Zafiro Tours explican que están notando un repunte en estos dos ámbitos, especialmente para acudir a lugares con buen tiempo como las Islas Canarias o espacios paradisíacos del Caribe. Viajes habituales que vuelven a activarse. Los cruceros por el Mediterráneo son de nuevo un atractivo turístico para sus clientes, que empiezan a reservar para el verano.
Desde Sanpaio apuntan a que la campaña de Semana Santa está teniendo destinos con buena acogida como Praga, Estambul y las Azores, respondiendo a la buena tónica de reservas para este período vacacional.
El conflicto bélico llega en una época de repunte tras el impacto del coronavirus
Antes de la guerra en Ucrania la situación no era boyante en cuanto a las agencias de viajes, que veían como el covid había parado su ritmo de trabajo habitual durante dos largos años. Con todo, poco a poco se fueron recuperando pese a los vaivenes de las seis olas que hemos sufrido. «Estábamos en un repunte tras la sexta ola», señala Pelayo temiendo un nuevo parón en las épocas más activas del año.
Por su parte, Ferradás indica que en Zafiro Tours notaron un aumento progresivo desde el año pasado. «Estamos en una época de repunte, ya no quieren quedarse en casa. Después de dos años malos en líneas generales, la gente opta por viajar», explica. Por otra parte, también elucubra sobre como puede ser la campaña de verano. «Puede ser un verano razonablemente bueno. No como en la prepandemia, pero sí que notamos que la gente tiene interés en salir», afirma.
Cambio de hábitos
En estos dos años de pandemia los usuarios han cambiado su forma de hacer viajes en algunos aspectos. Ferradás apunta que notan especialmente un cambio a la hora de reservar, siendo cada vez más previsores. «Estamos notando que se reserva antes que otros años. La gente es previsora porque desde enero empiezan a reservarse viajes para el verano», sostiene.
Desde Viajes Sanpaio indican que en los hábitos también se han producido cambios en cuanto a los destinos, aprovechando las nuevas ofertas disponibles en los aeropuertos del país con conexiones directas con las Islas Seychelles, Mauricio o Estambul. Sin embargo, los clientes no renuncian a pasar sus vacaciones en lugares emblemáticos como Nueva York, que según afirma sigue teniendo mucho tirón entre el público. Y como no, el buen tiempo es un factor que no cambia para los viajeros, que buscan climas cálidos para escaparse, siendo Canarias el destino predilecto.