El equipo rojinegro tendrá respaldo de centenares de aficionados
11 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La cuenta atrás ya comenzó para que el CD Lalín viva uno de esos hitos que jalonan la historia de cualquier club deportivo. En este caso salir del infierno en que lleva sumido hace varias temporadas al caer a Primera Autonómica. En esta ocasión está tan cerca que nadie quiere pensar en no alcanzar el ascenso a Preferente Galicia, aunque tendrá un hueso duro de roer en el Eume Deportivo. El encuentro se disputará hoy (18.00 horas, A Gándara) en Pontedeume, ante un rival que convirtió su campo en un bastión casi inexpugnable durante la temporada regular.
El conjunto rojinegro buscó en la ida con ahínco viajar con ventaja pero no logró perforar la portería de un Eume Deportivo que en el Cortizo optó por un planteamiento conservador, aplicándose en tareas defensivas, con un fútbol más destructivo que creativo. El choque acabó en tablas sin goles, con todo por decidir en la vuelta de esta tarde. El técnico lalinense, Toño González, tendrá de nuevo un amplio elenco de jugadores para convocar a los dieciséis que podrán estar en el choque.
El duelo en casa seguro que le permitió a González extraer nuevas conclusiones del rival, que suele moverse por una línea de juego muy diferente a la del CD Lalín. Prefieren un fútbol más directo y en busca de la segunda jugada que el estilo más combinativo y de pase para avanzar que suelen aplicar los rojinegros, aunque como siempre todo dependerá de la evolución del encuentro. En principio se espera que ningún equipo arriesgue en exceso de inicio, para adoptar decisiones según se vayan consumiendo los minutos. Quien marque primero dará un gran paso, ante la exigencia que supondrá para el rival, ya que ahora no hay margen de error ni otro partido para solucionarlo.
El CD Lalín no estará solo en Pontedeume ya que la afición de nuevo se volcará para alentar al equipo en ese objetivo de ascender. Desde el club se pusieron hasta tres autobuses para viajar, dos llenos y probablemente el tercero también. A ello se sumará un cuarto que fleta el Frente Roxinegro con medio centenar de peñistas, junto con el quinto donde se desplazarán jugadores, directivos y algún aficionado. Y no hay que olvidar los desplazamientos en vehículos particulares para sumar varios centenares de seguidores dispuestos a hacerse notar.
Solo queda poner la guinda a la temporada como nuevo equipo de Regional Preferente tras esos 90 minutos decisivos. En caso de lograrlo sin duda se desatará la euforia y la celebración por las calles lalinenses. Porque el club rojinegro tiene solera e historia para estar al menos en esa categoría y, quién sabe, buscar cuanto antes el regreso a Tercera.