
La familia del fútbol sala pontevedrés ha perdido a uno de los jugadores que vivió -y protagonizó- una de las etapas más gloriosas de este deporte en la ciudad del Lérez y del Reale Seguros estradense. Después de tres años de lucha contra un cáncer en el sistema linfático, José Roberto Camilo Lima, Beto, falleció en la madrugada del miércoles en Sao Paulo, a donde había regresado el pasado junio y donde tuvo la oportunidad de despedirse de buena parte de su familia. El jugador brasileño enamoró a la hinchada del hoy extinto Rías Baixas entre 1991 y 1996, con el que ascendió a la élite del fútbol sala nacional. Trotamundos de su deporte, Beto también dejó su sello en el Burela, el Yumas de Valencia, el Caja Castilla La Mancha, el Avilés o el Burgos. Llegó al Reale de A Estrada en agosto de 2006, vivió el ascenso a la División de Plata en agosto de 2007 y dejo el club en agosto de ese año.