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Desvelan el misterio del peregrino estradense de metal

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

A ESTRADA

E CUIÑA

Es una obra del escultor Manuel Lago y busca plaza para lucirse

31 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La Praza do Concello de A Estrada amaneció este lunes con un visitante inesperado. Un peregrino de metal de 1,80 metros de alto tomó el espacio público por sorpresa. Nadie sabía quién era el autor de la obra ni cómo había llegado a su emplazamiento. Hasta que el hijo del escultor, de forma anónima, confesó. Xoán Lago Blanco aprovechó la tradición de los Santos Inocentes para sorprender a los estradenses con la imponente escultura del peregrino creada por su padre, Manuel Lago Román. Xoán buscaba un triple objetivo: gastar una broma a su padre -a quien la obra le fue sustraída sin previo aviso-, despertar la curiosidad general y, de paso, sacar a la luz el trabajo escultórico de su progenitor. Contó con la ayuda de Estefanía y Natalia Rozados y de Alfonso Uzal para colocar con nocturnidad la pesada obra en la Praza do Concello.

Manuel Lago Román es originario de Vigo, pero lleva dos décadas afincado en A Estrada, a donde se trasladó cuando inició su carrera empresarial en el vecino municipio de Cuntis. Tiene 70 años y, desde que se jubiló hace cinco, ha sacado a relucir su vena artística. Manuel Lago regentó durante años una industria de estructuras metálicas y luego una empresa de alquiler de maquinaria que ahora llevan sus hijos Xoán y David. Del primero de los negocios le viene su familiaridad con el metal, el material elegido para sus esculturas «Lo que más uso es la varilla corrugada. Es un material de los más usados en construcción, pero siempre está oculto, invisible», explica. Lago reivindica el potencial artístico de la varilla corrugada, que doblega a su antojo para crear auténticas obras de arte. «Normalmente queda oculta en el cemento. A mi me gusta darle vistosidad», explica.

A Manuel -que ha encajado muy bien la broma que ha dado a conocer públicamente su faceta de escultor- le gustaría que la escultura pudiese formar parte del paisaje del Camiño da Geira a su paso por A Estrada. «Si el Concello me la comprase donaría una parte a la hostelería del pueblo, para superar estos momentos difíciles», avanza.