
Una muestra descubre el valor culinario o cosmético de la planta
08 nov 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La camelia es mucho más que una flor de invierno. Aunque no muchos lo sepan, existen té de camelia, aceite de camelia que se usa tanto en gastronomía como en cosmética o madera de camelio muy apreciada en la escultura.
De todas estas aplicaciones y de muchas otras curiosidades trata la exposición que este martes se inauguró en la Praza do Concello de A Estrada. Organizada por la Sociedad Española de la Camelia, la muestra, titulada A camelia, flor das galegas e galegos, reúne una serie de tótems en los que se da cuenta de aspectos interesantes relacionados con el universo de la camelia. En algunos, como valedores de la flor aparecen personajes bien conocidos en la comarca, como el aloitador de la Rapa de Sabucedo Michel Touriño, la zoqueira de Merza Elena Ferro o el ganadero de Zobra Manuel Doval.
La exposición incluye un stand en el que pueden verse —y comprarse algunos— productos de marcas gallegas con la camelia como protagonista. Como los jabones y cremas del Pazo de Rubianes, los aceites de camelia de la marca Acemelia, los tés de camelia de Orballo o las colecciones de bisutería de Silvereira y del Obradoiro Hedra dedicadas a la camelia.
Revisando los tótems se aprende mucho. En el plano gastronómico, se explica que el aceite de camelia se obtiene a partir del prensado en frío de semillas de algunas especies y se usa en China desde hace más de 1.000 años. Con propiedades similares al aceite de oliva, en los países asiáticos se utiliza en alimentación. Asimismo, en cosmética se usa por su alta capacidad de penetración e hidratación y su poder antioxidante, antifúngico, antibacteriano o cicatrizante. Se puede usar directamente sobre la piel o como base o componente de cremas, champús, bálsamos labiales o esmaltes de uñas.
Por su parte, el té de camelia se prepara a partir de hojas y brotes secos de la especie Camellia sinensis, originaria de China. Según el procesado de los brotes hay cuatro tipos de té: blanco, negro, verde y rojo.
En la actualidad existen firmas gallegas que comercializan tés, mermeladas o miel de camelia y algunos restaurantes que incluyen en su carta platos como el Merengue de camelia o el Tataki de vaca con pétalos de camelia encurtidos.