Operaciones en Lalín y demanda de más Guardia Civil y Policía Nacional

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

LALÍN

Miguel souto

Concello y Subdelegación del Gobierno hacen una llamada a la convivencia pacífica

06 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

La junta de seguridad se celebró ayer en Lalín con dos temas sobre la mesa: uno las supuestas irregularidades en el padrón y otra, el clima de inseguridad del que se hacían eco los vecinos y que achacaban especialmente a ciudadanos de origen extranjero, poniendo el foco especialmente en los argelinos. En cuanto al padrón: Concello y Subdelegación del Gobierno discreparon y cada uno puso la pelota en el tejado del otro haciendo declaraciones por separado.

En cuanto a los problemas de inseguridad ciudadana achacados en la calle a los argelinos, los datos, desmintieron esta percepción. El teniente coronel Óscar Graña, señaló que el índice de criminalidad en la zona era de 24 delitos por cada mil habitantes, una media inferior a de la provincia que es de 30, la de Galicia que es de 27 y la de España que es de 30. Los delitos cometidos en Lalín en los que va de año fueron 280, un 10 % menos que los del mismo período en el 2023, que fueron 257. El índice de esclarecimiento en este mismo período fue el año pasado del 43,9 % en la zona y este año esá siendo del 49 %. De los 197 detenidos de enero a agosto del 2023, 10 eran argelinos y este año, de enero a finales de agosto, van 186 detenidos, de los cuales eran argelinos 6.

Ayer tanto el subdelegado del Gobierno como el alcalde de Lalín hacían ayer una llamada a la convivencia pacífica. Ambos coincidían en la necesidad de un mayor número de efectivos. Crespo apuntó el refuerzo en marcha de tres nuevos policías locales y Abel Losada explicó que se esperan cubrir en la próxima convocatoria de la Guardia Civil tres vacantes existentes. El subdelegado reconoció que el catálogo de plazas era el heredado de los recortes sufridos en la crisis. El alcalde recordó que hace años, cuando Lalín pasó a ser puesto principal, ya pedía personal suficiente para permitir la existencia de dos patrullas en la zona de la Guardia Civil. Reclamaba que una fuese para Lalín y la otra para el resto de los municipios con coordinación entre ambas en la atención diaria de seguridad ciudadana.

Ampliación de servicios

Crespo demandó a Losada el incremento de efectivos de la Policía Nacional en la oficina del DNI existente en Lalín para poder contar con una oficina de información de extranjería desde donde se facilite a los extranjeros la obtención de información y la tramitación de gestiones junto con la posibilidad de encargarse, apunta, de posibles investigaciones llegado el caso y que daría servicio a toda la comarca de Deza, no solo a Lalín. Con esto, apunta el regidor, mucha gente de la comarca evitaría tener que desplazarse a Pontevedra.

En cuanto a la existencia de una presunta mafia en Lalín instó a las fuerzas de seguridad a investigarlo. Crespo se mostró satisfecho con la labor de la Guardia Civil y la colaboración brindada por la Policía Local recordando que ya desmantelaron en su día una banda que había dado problemas en la praza Europa «e agora desmantelaron outra» mientras que Losada habló de varias investigaciones en marcha por parte de la Guardia Civil.

Losada consideró que la reunión fue «sorprendente en orixe» y que obedecía al debate político suscitado entre los grupos políticos municipales. Cree que «esa anomalía estadística» que hace de que cada 2 de cada 3 argelinos de la provincia vivan en Lalín, «quen ten que afrontala e non sei si investigala ou estudala é estar pendente de porqué se produce é como evoluciona é o Concello». Dice que Extranjería solo tramita solicitudes de regulación y Estadística lo que hace es depurar dobles registros.

Discrepancias en relación a las competencias de actuaciones en relación al padrón

En cuanto al padrón: Concello y Subdelegación del Gobierno discreparon y cada uno puso la pelota en el tejado del otro haciendo declaraciones por separado.

El alcalde, José Crespo, defendió la legalidad del proceso de empadronamiento en Lalín esgrimiendo un informe del secretario y del departamento de estadística. En él se indicaba que «estase a cumprir en todos os casos coa normativa vixente, esixindo a achega de documentación relativa á identidade e a acreditativa da residencia no municipio».

Explican que para acreditar la residencia en el domicilio, deberían aportar, en el caso de ser propietarios de la vivienda, la escritura o documento de compraventa, entre otros, y en el caso de ser inquilinos, el contrato de alquiler y que en otros supuestos se debería aportar autorización de los propietarios o arrendatarios de la vivienda.

El informe, insisten, rebate las acusaciones hechas en su día por el BNG señalando que «todas as persoas empadroadas nun domicilio aportaron cando realizaron a súa inscripción padroal toda a documentación acreditativa e as autorizacións necesarias».

Para Crespo es la Subdelegación del Gobierno la que tiene las competencias señalan que debe ser la Policía Nacional, o en todo caso, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, como puede ser la Guardia Civil a falta de Policía Nacional, los que tienen que investigar si existe algún tipo de anomalía. El subdelegado, en cambio, insiste en que las competencias del padrón son estrictamente municipales y que corresponde al Concello investigar si la gente está empadronada donde dice estarlo y comprobarlo. El regidor afirma que ese tipo de investigación solo se hace cuando existe una denuncia y que no existe en este momento ningún contencioso en ese sentido. Anima a la oposición o a los vecinos que crean que existe alguna irregularidad a denunciarlo «e non falar e agochar a man».

Una creciente comunidad argelina con 284 personas

En la reunión se pusieron sobre el mesa los números que avalan el crecimiento paulatino del número de vecinos de origen argelino en Lalín. Una comunidad que cuenta, dicen, en este momento con 284 personas frente a las 180 que se contabilizaban en el 2019, lo que hace que sean una de las más numerosas junto con venezolanos, brasileños, colombianos, marroquíes y rumanos. Proporcionalmente, apuntaron desde la subdelegación, hay 20 veces más argelinos en Lalín que en Madrid. Una población inmigrante que también crece en Rodeiro al amparo del trabajo en granjas.