La Diputación dice que busca un espacio alternativo para almacenar sus contenidos tras pedirles el Concello la cesión de la actual sede en el castro tecnológico
26 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.No hubo ningún anuncio institucional ni siquiera un cartel advierte a quien se acerque del cierre. Pero desde el pasado agosto el museo virtual de los castros de Lalín, dependiente de la Diputación de Pontevedra, bajó la persiana. Ocupaba uno de los bajos del castro tecnológico desde noviembre del 2016, cuando fue inaugurado bajo la denominación CastroDeza-GastroDeza, aunque terminó por conocerse popularmente tan solo como CastroDeza.
Desde el gobierno provincial confirman que ese museo virtual de los castros, que también sirve de escaparate para la gastronomía dezana, no se reabrirá en su emplazamiento actual. Tras concluir en agosto el contrato con la empresa adjudicataria de la gestión de CastroDeza se decidió paralizar una nueva licitación. ¿Por qué? Argumentan que el Concello de Lalín les trasladó una solicitud para la cesión de esas salas, a las que pretende dar una nueva finalidad. Una petición que previsiblemente va a ser aceptada, no en vano se trata de dos Administraciones locales gobernadas bajo el mismo signo político y también resulta conocida al buena sintonía personal entre el presidente de la institución provincial, Luis López, y el regidor lalinense, José Crespo.
Que se aprobará la transmisión de ese espacio museístico en el icónico edificio diseñado por Mansilla y Tuñón al Concello parece también confirmarse al asegurarse desde la Diputación que están en la búsqueda activa de un espacio en Lalín donde almacenar todo el material existente en CastroDeza. Una vez que se cuente con esas dependencias se procederán a vaciar las salas que actualmente ocupa este museo virtual de los castros, paso previo o quizás paralelo a la tramitación del expediente para atender la pretensión municipal de conseguir la cesión de esa parte del castro tecnológico, con acceso directo e independiente a la plaza central.
Cierre temporal
Desde el gobierno provincial insistían que se trata tan solo de un cierre temporal. Quieren reubicar CastroDeza en otro lugar en Lalín, pero por ahora no se desvela ni dónde ni cuándo será la reapertura de este museo, que tenía entrada gratuita y que se incluía en muchos circuitos de visitas. Entre ellas las promovidas por la propia Diputación desde distintas localidades y comarcas de la provincia.
Este centro de interpretación de la cultura de los castros de la edad del hierro, patrimonio inmaterial y gastronomía de la comarca de Deza contaba con página en Facebook, que dejó de contar con entradas desde el día 13 de agosto. Tampoco está ya activa la página web que tenía un espacio donde, además de las visitas guiadas a sus distintos recursos, también se organizaban distintas actividades. Entre ellos por ejemplo un taller promovido la pasada Navidad para los más pequeños con el fin de que elaborasen casitas, para después exponerlas en el consistorio, dentro del programa de Aldeas de Nadal.
Desde proyección de 360 grados sobre este patrimonio a una pantalla táctil
En las cuatro salas que conformaban hasta ahora la propuesta de CastroDeza se da un especial protagonismo a las nuevas tecnologías para presentar ese abundante patrimonio arqueológico y gastronómico que atesora la comarca dezana, así como su propia memoria colectiva. En total son 299 metros cuadrados de espacio museístico interactivo donde destaca la zona central, la de mayores dimensiones y con asientos de colores. En ella se podía seguir una proyección de imágenes en una pantalla de casi 360 grados, donde en poco más de tres minutos de imágenes y sonido se acerca al espectador ese pasado de estas tierras, al mundo mágico de los mitos y leyendas con los castros como vector integrador.
En otra de las salas se cuenta con una pantalla táctica que refleja todo el territorio de Deza e incluye la localización de los 107 castros catalogados en la comarca. Algunos de esos yacimientos arqueológicos se recrear en tres dimensiones al tocar y que solía cautivar al público infantil. Un tercer espacio cuenta con cinco tótems con sistema de audífonos y pantallas de vídeo para que dezanos acerquen al oyente desde cuentos a leyendas locales.
El último espacio está centrado de forma más específica en la gastronomía. Para ello se bautizó como De la tierra al plato un gran muro interactivo. Así, acerca al visitante qué comían los pobladores de los castros, con códigos QR para ampliar datos o descargar recetas. Además se incide en la vinculación de la alimentación con paisaje y clima, con la dieta atlántica de telón de fondo, incluyendo fiestas y productos, o un viaje culinario por Deza con protagonismo para el cocido.
Desaparecido de la web de Turismo Rías Baixas
Si decidimos buscar CastroDeza en las distintas páginas web para conocer esta propuesta museística nos encontramos situaciones dispares. En Turismo Rías Baixas, dependiente de la Diputación, ya no se puede encontrar este recurso. Por tanto ha desaparecido entre las propuestas a visitar en la provincia pontevedresa para quienes accedan a esa web institucional. Pero no ocurre lo mismo con la página del Concello de Lalín, donde sí se informa sobre este centro de interpretación sin reflejar que está cerrado al menos de forma temporal.