La propuesta del artista lalinense alerta sobre el impacto humano en el mar
22 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El 2024 a punto de concluir supone el impulso para un joven artista lalinense. Álex Dávila, que firma sus obras con el seudónimo Dreads, acaba de conseguir un segundo reconocimiento en pocas semanas. Si cosechaba el primer premio en el concurso de muralismo convocado por el ayuntamiento murciano de Alcantarilla, en ese caso en tándem con Olalla Framiñán, hace unos días acudía a la Cidade da Cultura para recoger el otorgado en la categoría de grafiti dentro de la convocatoria Xuventude Crea de la Xunta de Galicia.
A esos dos galardones se suman encargos pendientes de ejecutar para el Concello de Agolada, una exposición en Lalín, nuevas series de creación digital,... Un año como punto de inflexión para darse a conocer en el siempre complejo mundo del arte, máxime cuando principalmente su campo de actuación está en el muralismo y el grafiti. Dreads tuvo que ejecutar su obra para el concurso autonómico en un día, compitiendo con otros siete participantes. De 10.30 a 16.30 tenía plasmar sobre una superficie de 4 x 2 metros su propuesta de temática libre. Y, dice, le sobró más de hora y media.
Con espray, acrílicos y brocha tocaba a cada artista crear a su gusto. Álex Dávila optó por una composición con mensaje social bajo el título O mar non e un vertedoiro. Una orca copa el protagonismo sobre un fondo donde aparecen las letras que son su seña de identidad, donde otros ven incluso simpáticas caras, constante desde sus inicios en el grafiti. En azul ese maremágnum de letras destaca la grandeza del animal, el puntillismo en sus formas y colores vivos como el rojo, para aludir a la contaminación.
Dreads creo una cuadrícula base sobre la que gestó la orca, especie que por primera vez aparece en su obra, después de copar protagonismo las tortugas. Logró el primer premio en su primer Xuventude Crea y no podrá competir en el 2025. Ahora espera que el Concello de Lalín se percate de que cuenta con representantes de la cultura urbana y el grafiti, a pesar de ser un sitio pequeño, por los que apostar. Remarcó que se trata de una forma de expresión artística, no vandalismo. Y afronta el futuro con ilusión tras el nuevo premio.