
Las transacciones de inmuebles a estrenar suponen el 5 % del total
23 mar 2025 . Actualizado a las 05:00 h.A lo largo del 2024 el mercado inmobiliario de las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes se mantuvo en una dinámica muy similar al del año anterior. Las transacciones apenas variaron, con un descenso mínimo de seis operaciones, pasando de 454 a 449. Lo más destacable está relacionado con la compraventa de inmuebles a estrenar, que aumentó, aunque sin aportar al mercado cifras mareantes. Concretamente se compraron 24 viviendas nuevas, ocho más que en el anterior balance.
Los datos del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible cifran este crecimiento en Lalín. Es en la capital dezana donde se llevan la palma en los inmuebles a estrenar, con el 79 % de todas las transacciones en este apartado. En total se realizaron 19 movimientos, 8 de ellos en el tercer trimestre. En A Estrada se vendieron 3 viviendas nuevas y en Silleda dos. Volviendo a la urbe lalinense, casi el 12 % de las acciones de compraventa que tuvieron lugar en el 2024 fueron de casas y pisos nuevos.
En cuanto a las viviendas de segunda mano, en Agolada, Dozón, Forcarei, Rodeiro y Vila de Cruces todas las operaciones de compraventa se incluyeron en este ámbito. En A Estrada fueron 117, 148 en Lalín y 79 en Silleda. Proporciones y escenarios habituales en la última década, donde los principales núcleos urbanos acumulan la mayor parte de la actividad inmobiliaria.
Protegida o libre
En cuanto a la tipología, la mayoría son libres y una pequeña parte, protegidas. En bruto, 436 son vivienda libre y 13 protegida. De hecho, en cinco concellos solo se han realizado transacciones con inmuebles libres, como es el caso de Agolada, Forcarei, Lalín, Rodeiro y Vila de Cruces.
En cambio, en A Estrada y Silleda se vendieron algunas protegidas. En el municipio estradense se dieron la mayoría de estas operaciones, comprándose un total de doce viviendas protegidas. En Silleda fue una.
Cifras modestas
El único ayuntamiento en el que no tuvieron lugar operaciones de compraventa inmobiliaria en el año 2024 fue Dozón. Nada a extrañar teniendo en cuenta el tamaño y la población del concello. Con respecto a los otros municipios rurales, en Agolada se realizaron 13 transacciones, mientras que en Rodeiro fueron 11. Por otro lado, en Forcarei se realizaron casi una treintena (29) y en Vila de Cruces una menos, 28. Todas ellas muy por debajo de A Estrada, Lalín y Silleda.
Casi el 40 % de las operaciones de compraventa en la zona se produjeron en la capital dezana
En lo que respecta a las principales urbes de las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes, Lalín fue el principal foco de actividades inmobiliarias en el 2024. La capital dezana aglutinó el 37 % de las operaciones de compraventa con 167 movimientos, muy por encima del dato estradense, que sumó 120 (26 %).
En el duelo entre los municipios de similar tamaño, Lalín queda de nuevo por delante, aunque en el apartado de las construcciones A Estrada parece tomar ventaja en cuanto a obra nueva. Con todo, la estadística tiene cierto sentido en tanto en cuanto la localidad dezana cuenta con más habitantes
En tercera posición, lógicamente, está Silleda con 81 transacciones, el 18 % del total.
Cuarto trimestre
En cuanto al período con más movimientos, destaca ligeramente el cuarto trimestre, donde se cerraron 131 operaciones de compraventa. También fue especialmente positivo el segundo trimestre, de abril a junio, donde se realizaron 126 transacciones. El récord en un trimestre lo tiene Lalín de julio a septiembre, con 55 movimientos.
El alza de los materiales y de la mano de obra merma una oferta que no da abasto
El mercado inmobiliario en la zona vive un momento delicado, principalmente porque la oferta de vivienda nueva es mínima. A Estrada y Lalín acumulan problemas generalizados en toda Galicia, aunque para el alquiler mantienen cierta seguridad y rentabilidad que continúan haciendo de esta modalidad un valor seguro. Asimismo, los precios están entre los más bajos de la comunidad, pero siguen al alza por el aumento de la demanda y la poca oferta de calidad.
En lo que respecta a los inmuebles a estrenar, el coste de los materiales y la escasez de mano de obra está lastrando la construcción de viviendas. En cualquier caso, los datos de transacciones hablan de un año positivo, al nivel de los anteriores y, precisamente, con un ligero crecimiento en este apartado a pesar de la gran mayoría de segunda mano.