La Fervenza do Toxa, ya sin coches y con 1,7 kilómetros para caminantes

P. V. LALÍN / LA VOZ

SILLEDA

El Concello ya colocó las barreras y quedó cortado el tráfico rodado el entorno

25 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Apagada ya la calentura del debate público de la solución dada al acceso al mirador, aunque no el impacto que conlleva, el proyecto silledense para mejorar los accesos y la señalización a la Fervenza do Toxa y al Monasterio de Carboeiro sigue avanzando, tras haber sido aprobada una ampliación de plazo de ejecución y certificaciones hasta el 30 de octubre dado el escaso margen anterior, de un mes menos.

El entorno quedó ya cerrado al tráfico rodado, salvo usuarios de fincas o emergencias, con la colocación de dos barreras de madera, una en el inicio de la bajada a la base de la Fervenza, a la altura de la intersección con el vial de los miradores, y otra en el arranque del último tramo donde ya estaba vallado antes para evitar el acceso subiendo por Quintas, localidad a la que se llega con normalidad y desde la que no se recomienda seguir por no encontrar luego aparcamiento.

La recomendación es, por la misma causa, para que el visitante deje el vehículo en la iglesia hasta habilitar el párking de la próxima escombrera del Adif. Desde ese aparcamiento, la señalización encamina a los usuarios por una ruta nueva y atractiva de medio kilómetro que lleva directamente al mirador y desde este se continúa ruta hacia la base de la catarata que está a 1,2 kilómetros del mirador.

El acceso al Toxa, sin coches y sin humos, se convierte ya formalmente en una ruta peatonal que supone un paseo de 1,7 kilómetros totales desde el aparcamiento del Adif, un poco más mientras no se habilite este y se salga desde la iglesia.

El Concello apuesta fuerte por proteger su joya natural rompiendo con una inercia de aproximación de vehículos que se apostaban a los lados de los viales sin solución de aparcamiento formal, ocupando espacios de propiedad particular. El Concello mantuvo encuentros con los vecinos y encontró la solución de las barreras que los vecinos en caso de necesidad de uso agroforestal pueden traspasar.

El Concello reforzará con cartelería explicativa y disuasoria el nuevo régimen de uso del entorno al turista que llegue en vehículos, tratando de encauzarlo al aparcamiento público, evitándole aproximarse algo más con el coche hacia Quintás al tener que retornar luego por falta de aparcamiento.

El presupuesto de 59.000 euros incide en estas acciones y en otras que también benefician al cenobio de Carboeiro.

El enclave ya tiene señalización desde múltiples puntos

El proyecto de mejora de accesibilidad a Fervenza do Toxa y Carboeiro también afronta el déficit histórico de señalización, sobre todo hacia la cascada. Los indicadores están o se instalan estos días en múltiples sitios: rotonda de AP-53, N-520, cruce del tanatorio, enlaces en Breixa, A Bandeira,...