Crónica | Iberia subcontrata los vuelos del puente aéreo Los pilotos comienzan mañana una semana de huelga en protesta por el peligro que, según su sindicato, supone la creación de Catair, la compañía filial de bajo coste
08 jul 2006 . Actualizado a las 07:00 h.Los pilotos están molestos con Iberia y medio país lo está con los pilotos. Pese a la reunión que durante dos horas y media mantuvieron en la tarde del pasado lunes en el Ministerio de Fomento el secretario general de Transportes, Fernando Palao, y el jefe de la sección sindical del Sepla-Iberia, Bernardo Obrador, la huelga de pilotos prevista para la semana próxima sigue convocada. Los pilotos afirman que el motivo no es la creación, por parte de Iberia y de otras cuatro compañías, de Catair, una aerolínea de bajo coste que operará a partir de octubre desde Barcelona, sino las consecuencias que eso podría traer para los empleos de los 1.800 pilotos de Iberia. Obrador insistía, en la rueda de prensa que ofreció en la mañana del viernes, que el objetivo real es «vaciar» Iberia a través de esta filial. «Nuestros puestos de trabajo peligran a corto, medio y largo plazo», subrayaba el portavoz del Sepla-Iberia, y esgrimía cifras, como que Catair nacerá con 30 aviones de corto recorrido, curiosamente los mismos que suprimirá Iberia, que operará con 134 aeronaves. Sobre el número de pilotos, según Obrador, la filial tendrá 360 e Iberia 1.153, lo que supone 12 pilotos por avión para la primera compañía y 9,77 para la segunda, a lo que hay que añadir el número de empleados, que en el caso de Catair sería de 900 frente a los 11.3060 de Iberia (descontado el personal de handling y de mantenimiento), con lo que el total de empleados por avión ascendería a 30 en la filial y a 96,27 en Iberia. Para el responsable del Sepla-Iberia esa «gestión desastrosa es el cáncer de Iberia, el motivo por el que quieren cerrarla y pasarse a Catair». Otro ejemplo ilustrativo es, según Obrador, que Iberia lleve año y medio sin contratar nuevos pilotos, lo que se traduce en retrasos, cancelaciones de vuelos y pasajeros que se quedan en tierra por la falta de personal para cumplir lo que establece la ley. Tanto es así, que Iberia ya alquila vuelos de otra firma, Audeli -que ha llevado a la confusión con Autoescuelas Delicias- para realizar 77 vuelos diarios. De hecho, Iberia ya no opera el puente aéreo, que en su totalidad está cubierto por Audeli, «pero con aviones pintados de Iberia y sin ningún distintivo que indique lo contrario», pero cuyos pilotos y azafatas no son de Iberia, «con lo que la gente paga una línea de bandera cuando en realidad se está dando servicio de bajo coste». La exigencia del Sepla para desconvocar la huelga era que la compañía presentase un aval bancario que garantizase a los pilotos su sueldo hasta los 65 años, «con una subida salarial del IPC más dos puntos», según confirmó la aerolínea, lo que supondría un aval por importe de 6.000 millones de euros, que es tres veces el valor de Iberia en Bolsa. Así las cosas, la reunión con Fernando Palao no cambió la conflictiva situación, aunque Obrador había anunciado que Fomento podría ofrecer el aval que le reclamaban a Iberia, algo que finalmente no fue así. Del encuentro no trascendió nada, salvo que tenía carácter meramente «informativo». Ayer volvieron a reunirse. Por la mañana y por la tarde. Los resultados de los encuentros fueron infructuosos.