Amancio Ortega acaba de hacerse, a través de su sociedad de inversiones Pontegadea, con diez inmuebles emblemáticos que el Banco Santander tiene en España, entre los que figura el edificio de la entidad financiera en Castellana 24.
Los representantes del presidente de Inditex y de Emilio Botín cerraron ayer el acuerdo, que fue comunicado a última hora de la tarde a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El importe de la operación asciende a 458 millones de euros, según confirmó la propia entidad financiera en su comunicado.
Ortega incorpora a su cartera inmobiliaria 10 edificios emblemáticos de España con una superficie conjunta de 77.579 metros cuadrados. Se hizo con tres de los cinco lotes que el Santander puso a la venta. No pudo comprar, sin embargo, un inmueble ubicado en Zaragoza, en la calle del Coso, en el que por su interés histórico-artístico tiene derecho de retracto la Administración.
El acuerdo incluye también un contrato de arrendamiento de 40 años para el propio banco, que además se reserva un derecho de opción de compra.
El lote número dos incorpora el edificio de la Castellana, con una superficie de 22.952 metros cuadrados.
En el lote tres figuran los edificios de Valladolid, Barcelona, Palma de Mallorca y Málaga, con 22.879 metros cuadrados en conjunto. Y en el lote cuatro están los inmuebles de Bilbao, Oviedo, Sevilla y Valencia, con más de 39.000 metros cuadrados.
El Santander anunció a mediados de año que vendería su parque inmobiliario en España, excepto su sede histórica en Santander. Estos inmuebles se repartieron en cinco lotes, de los que ahora faltan por vender el número 1, donde está la ciudad financiera de Boadilla, con una superficie total de 1.350.000 metros cuadrados, de los que han sido construidos 432.000; y el lote número cinco, donde figuran 1.250 sucursales que la entidad tiene en territorio español.
De acuerdo con las estimaciones que en su momento hizo el banquero, el Banco Santander ingresaría con la venta de sus inmuebles en torno a unos 4.000 millones de euros. Ahora acaba de ingresar 458 millones.
De acuerdo con distintas fuentes, el valor de la ciudad financiera podría rondar los 1.800 millones de euros -el banco nunca confirmó esta cantidad, pero tampoco la desmintió-, con lo cual las oficinas y el edificio de Zaragoza que se queda fuera de la operación con Ortega tienen que ser vendidas por 1.742 millones si el Santander quiere alcanzar su precio objetivo.
216 millones en plusvalías
En cualquier caso, con la operación de Ortega, el banquero ha conseguido unas plusvalías de 216 millones de euros. Estas se suman a los otros 600 millones de plusvalías que el presidente del banco obtuvo con la venta del 2,1% del capital de Telefónica hace 17 días, y a los otros 2.400 millones que se embolsó con la venta el pasado 8 de noviembre del italiano Antonveneta, del que ni siquiera tomó las riendas. Es decir, en menos de un mes, Emilio Botín, que no da puntada sin hilo, se embolsó más de 3.200 millones de plusvalías.
Siguen las negociaciones de los inmuebles que quedan por vender. Aunque el banco nunca quiso dar nombres se supo que multinacionales como Goldman Sachs, General Electric y Deutsche Bank estaban interesadas en participar en la puja.
La actual cartera inmobiliaria de Amancio Ortega incluye, entre otros, un edificio de oficinas en el centro de Berlín, que compró por 275 millones de euros; otro en el centro de Roma, que adquirió por 130 millones, y uno en Londres diseñado por Norman Foster.