El volumen negociado en las Bolsas españolas se elevó hasta el pasado mes de noviembre a 1,6 billones de euros, un 50% más que en el mismo período del año anterior, en un ejercicio que el presidente de Bolsas y Mercados Españoles (BME), Antonio Zoido, no tuvo empacho en calificar de «excepcional». Ante las turbulencias financieras desencadenadas el pasado agosto, «el mercado de valores ha respondido a la crisis crediticia ganando peso», aseveró.
Explicó que, si todos los episodios de crisis de las últimas dos décadas han servido para mejorar y fortalecer los mecanismos de funcionamiento de los mercados financieros, este proceso ha sido especialmente acentuado en las Bolsas de valores.
Transparencia
«La capacidad de los mecanismos bursátiles para fijar precios y referencias en todo tipo de circunstancias se revela cada vez más como un elemento indispensable a la hora de adaptar los sistemas económicos a condiciones cambiantes», dijo, y atribuyó esta virtud a la transparencia. En su opinión, la información que proporcionan las Bolsas «es fiel y puntual y un reflejo del consenso».
La cuarta posición de la Bolsa española por tamaño en Europa es un dato relevante si tenemos en cuenta que España es el quinto país por producto interior bruto después de Alemania, el Reino Unido, Francia e Italia, destacó Zoido en el tradicional almuerzo que celebra con los informadores en vísperas de las fiestas navideñas.
El presidente de BME comentó que las empresas cotizadas en el mercado español ya valen 1,4 billones de euros, un 21% más que al cierre del 2006. En lo que va de año, de las 18 ofertas de adquisición desarrolladas a lo largo del ejercicio, hasta noviembre se habían resuelto favorablemente 14 operaciones con un valor de 33.859 millones de euros. Durante el 2007 se han llevado a cabo, además, diez salidas a Bolsa mediante ofertas públicas con un volumen de 10.571 millones de euros, cifra que supera el récord absoluto del 2000.