La compañía Ence cerró ayer una operación de financiación a largo plazo por un importe total de 1.225 millones de euros, destinada a financiar la expansión prevista en su Plan Estratégico 2007-2011, en España y Uruguay.
La operación firmada con un sindicato formado por el BBVA, Banesto, Caja Madrid, Banco de Sabadell, Banco Popular y el ICO -en el que también interviene la Caixa Geral de Depósitos como mandatario- incluye dos contratos de financiación a largo plazo por 1.075 millones y una emisión de deuda subordinada de 150, según explicó la compañía pastera a la CNMV.
Ambos contratos -que suponen el segundo montante más elevado firmado este año en España- cuentan con la garantía de diversas sociedades de Ence. Según la empresa, la operación supone «un importante respaldo a su plan estratégico», al salvar sus necesidades de inversión para producir 2,4 millones de toneladas de celulosa y 3 millones de Mw por hora de energía renovable en el 2011.
Destino de las inversiones
El primer contrato financia el tramo A del crédito, por un importe máximo equivalente en dólares a 690 millones de euros, y tendrá como destino la construcción y abastecimiento de la planta de Punta Pereira (Uruguay).
El segundo, de 225 millones de euros, está dirigido a financiar las inversiones destinadas a elevar la producción de las plantas de celulosa y cogeneración españolas y mejorar su aprovechamiento forestal. Navia (Asturias) capitalizará la mayor parte de esta inversión, relegando a un segundo plano a las plantas de Huelva y Pontevedra.
El tramo C es una línea de crédito revolving (permite aplazar el pago) de 160 millones. Además, Ence colocará deuda subordinada en el mercado, por un importe de 150 millones de euros, una vez se hayan concertado los compromisos de suscripción preliminar con los potenciales inversores.