España se mantuvo en agosto, por quinto mes consecutivo, como el país de la Unión Europea con mayor índice de paro, según los datos que ayer proporcionó la Oficina Estadística de la Comisión Europea (Eurostat), que sitúan el desempleo español en el 11,3%, a un nivel que no se recordaba desde hace más de ocho años. Según Eurostat, España es además el país donde más ha crecido esa tasa en los últimos doce meses.
Las estadísticas indican que España es ya el único socio de los Veintisiete que mide la tasa de paro con dos dígitos, ya que Eslovaquia, que hasta hace poco era el Estado miembro con peores indicadores, la ha situado por debajo del 10% por primera vez desde su adhesión.
La tendencia apunta a que España seguirá siendo durante varios meses el país con las tasas de desempleo más elevadas, ya que el comportamiento de su evolución mensual es completamente opuesto al de los países que antes ocupaban esa posición. Si Eslovaquia ha rebajado sus índices de desempleo 1,3 puntos en un año, desde el 11,2% de agosto del 2007 al 9,9% de agosto del 2008, España ha pasado del 8,3% de entonces al 11,3% actual, es decir, tres puntos más en doce meses.
En el conjunto de la UE, el porcentaje de trabajadores sin empleo cayó en el último año en diecinueve países, subió en otros ocho y se mantuvo en uno. La mayor caída fue en Polonia (un 6%), y la mayor subida, la de España.
Eurostat calcula que en la Unión Europea hay 16,5 millones de trabajadores sin empleo, es decir, el 6,9% de la población activa, al mismo nivel que en julio del 2008, pero dos décimas por debajo de la tasa de agosto del 2007. En la eurozona, el número de parados asciende a casi 11,6 millones de personas, lo que representa el 7,5%, una décima más que en el 2007.