La bajada conjunta de tipos de interés abordada ayer por los principales bancos centrales del mundo no ha tenido el efecto deseado de apaciguamiento de los mercados.
09 oct 2008 . Actualizado a las 22:10 h.La bolsa española ha terminado hoy la sesión en 9.900 puntos, mínimo del ejercicio y nivel similar al registrado a mediados de julio del 2005, después de bajar el 3,83%, afectada por el retroceso de los mercados internacionales y de los valores energéticos.
Así, el principal indicador del mercado nacional, el Ibex-35, cedió 394,70 puntos, equivalentes al 3,83%, hasta 9.902,90 puntos, con lo que en este ejercicio acumula un retroceso del 34,77%. En Europa, con el euro a 1,366 dólares, Fráncfort cedió el 2,53%; el índice Euro Stoxx 50, el 2,46%; Milán, el 1,81%; París, el 1,55%, y Londres, el 1,21%.
La bolsa española comenzaba la sesión con ganancias que le acercaban al nivel de 10.500 puntos, impulsada por el sector financiero. El mercado celebraba con una subida del 2% los resultados de IBM, que había ganado un 20% más en el tercer trimestre, y las noticias que hablaban de que el Gobierno estadounidense estudiaba adquirir participaciones de bancos. Aunque Islandia nacionalizaba el mayor banco del país, el Kaupthing Bank, se conocía el apoyo franco-belga a Dexia, 4.500 millones, y se anunciaban medidas coordinadas entre Francia y Alemania para aliviar la crisis, a la bolsa le duraban poco las ganancias.
Al mediodía la bolsa incurría en pérdidas, después de que se conociera el último informe mensual del Banco Central Europeo, que señalaba el debilitamiento de la actividad y la incidencia mayor de lo esperado de la crisis financiera en la economía real. Aunque el descenso era moderado, el mercado volvía a las ganancias gracias a los datos laborales estadounidenses -las peticiones semanales de subsidios de desempleo bajaron de 498.000 a 478.000- y a las previsiones de que Wall Street abriría con ganancias.
La subida del 1% de Wall Street en la apertura, gracias a los resultados de IBM y a las estadísticas de empleo, no sirvió para sostener las pequeñas ganancias del mercado nacional. Con el retroceso de las empresas energéticas y el cambio de tendencia del resto de los grandes valores, y con la posterior caída del mercado neoyorquino, la bolsa española descendió hasta 10.000 puntos, cota que perforaba a media hora del cierre, momento en el que se situó en 9.900 puntos.
Todos los grandes valores bajaron: Iberdrola, el 8,56%, la mayor caída del Ibex, seguida de Repsol, el 7,63%, el segundo mayor descenso de este índice, mientras que Telefónica cedió el 3,44%; BBVA, el 3,34%, y Banco Santander, el 3,29%. Después de Iberdrola y Repsol, se situaron otras empresas del sector eléctrico, tocado por la regulación del sector que pueden acordar mañana los ministros de energía europeos. Así, Red Eléctrica cayó el 7,58%; Enagás, el 7,56%, y Endesa, el 6,43%.
Solo cuatro compañías del Ibex acabaron con ganancias, que lideró Indra al subir el 2,74%, en tanto que Bolsas y Mercados Españoles subió el 1,95%; Sacyr, el 0,75%, y Bankinter, el 0,71%. En el mercado continuo destacó la caída del 13,33% de Almirall, en tanto que ArcelorMittal, que mantuvo sus previsiones de resultados, lideró las ganancias con una subida del 10,38%.
En el mercado secundario de deuda, la rentabilidad de la deuda española a largo plazo subía ocho centésimas y se situaba en el 4,47%. En esta sesión, los inversores negociaron 5.378 millones de euros.