Los inversores europeos recibieron el año con poco negocio y buen ánimo, influidos por el positivo cierre del ejercicio en Wall Street y por los precios bajos de las acciones de muchas sociedades. Las bolsas se apuntaron notables alzas en el arranque de un ejercicio marcado por la incertidumbre. El Ibex-35 repuntó 290,50 puntos, equivalentes al 3,16%, y consiguió cerrar en 9.486,3 unidades, acariciando el listón de los 9.500.
El sentimiento fue unánime en otras plazas europeas. El parisino CAC 40 cerró con una fuerte alza del 4,09%, situado en 3.349,69 puntos, en un mercado de actividad reducida impulsado por valores bancarios y mineros. Londres se apuntó una subida del 2,88% que dejó el Footsie 100 en 4.562 puntos, mientras que el Dax alemán quedó en 4.973,07 puntos y el 3,39% más.
En Madrid todos los títulos cerraron en positivo. Gamesa lideró las alzas del Ibex, al dispararse sus acciones el 9,18% hasta 13,91 euros. En el sector bancario, el Santander ganó el 3,7% hasta los 7 euros; el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) repuntó el 4,27% para quedar a 9,03 euros y el Banco Popular registró una mejora del 6,09% y se colocó en 6,45 euros.
Al igual que las entidades financieras, también se recuperaron los títulos energéticos, con subidas del 5,03% en Repsol, que situaron su acción en 15,86 euros, y del 0,96% en Enagás. Y la bonanza se extendió al textil, donde Inditex recuperó el 6,73%, y a las telecomunicaciones. Aunque por debajo de la media, Telefónica subió el 2,78% y la acción cerró a 16,29 euros, mientras Iberia ganó el 1,52%.
Los ahorradores, no obstante, parecen haber abandonado sus preferencias por la renta variable, escaldados por las pérdidas del anterior ejercicio. Lo pone de manifiesto el balance anual que publicó ayer Bolsas y Mercados Españoles (BME). La Bolsa española negoció 1.243.144 millones de euros en el 2008, un 25,4% menos que en el año precedente. La trayectoria fue descendente: el sistema de interconexión bursátil apenas movió 60.973 millones de euros en diciembre, un 43% por debajo del importe de las operaciones realizadas en el mismo mes del 2007.
Ante la incertidumbre, las familias españolas se decantaron por atesorar su dinero en bancos y cajas en forma de depósitos. Con datos acumulados de enero a octubre, los hogares habían depositado en las instituciones de crédito 398.070 millones de euros, un 27,11% más que en el mismo período del 2007.