Caixa Galicia dirigirá la estrategia de la nueva caja, y Caixanova, finanzas y red

R. Santamarta / ?M. Á. Rodríguez REDACCIÓN/LA VOZ.

ECONOMÍA

Las dos entidades aprueban un reparto estrictamente paritario con Enrique Tellado como tercer ejecutivo.

29 jun 2010 . Actualizado a las 03:09 h.

Los consejos de administración de las dos cajas gallegas dieron ayer un paso prácticamente definitivo para sellar su fusión. Ratificaron el protocolo y plan económico de integración para lograr los 1.162 millones de ayudas públicas del FROB. Hubo unanimidad en las dos citas, la de A Coruña y la de Vigo, salvo por un voto contrario de CC.?OO. en la primera caja. Ya se ha traslado a la Xunta y también al Banco de España. El protocolo de integración supone la creación de un nuevo comité ejecutivo con 12 personas que serán, en la práctica, quienes lleven la nueva entidad financiera, la quinta del sector en España. Ese equipo es estrictamente paritario, con seis integrantes de cada firma. José Luis Pego estará al frente como director general, Javier García de Paredes como adjunto, y detrás de ellos emerge como tercer ejecutivo el más joven de ellos: Enrique Tellado. Adscrito a Caixa Galicia, se encargará de dirigir la estrategia de la financiera. Paralelamente, dentro de ese organigrama aparece un comité de integración conformado por los directivos más veteranos de las dos entidades: Óscar Rodríguez Estrada y Ramón Seoane. Esta área expirará a finales del 2013, cuando pase el período de transición. Tutelará mientras el control de gasto, los estudios financieros y la obra social. El protocolo de integración refleja, a su vez, que las dos fundaciones, con toda su red de edificios repartida por la ciudades gallegas, mantendrán su nombre y su estatus jurídico durante los tres años de transición, aunque con un presupuesto común. A partir de ese 2013 se fundirán. Junto a los anteriores habrá siete áreas de trabajo, con tres figuras con especial peso: Francisco Zamorano, encargado de riesgos, es decir, de la política de concesión de créditos; Juan Díaz Arnau, que se encargará de toda la red comercial, con más de 1.100 oficinas; y Victoria Vázquez, que llevará el área de finanzas. El resto del comité lo integran Domingo González Mera, al frente de planificación y control; José Valiño, que tutelará las aplicaciones tecnológicas; Gregorio Gorriarán, encargado de llevar el grupo inmobiliario (hoy integrado en la corporación industrial); y José Venegas, al frente de medios de pagos y banca por Internet. Esas áreas de negocio se mantendrán en las ciudades en las que ahora se encuentran. Es decir, las que tengan a su cargo miembros de Caixa Galicia se quedarán en A Coruña; las de Caixanova, en Vigo. Hay una división, la de riesgos, que Francisco Zamorano lleva desde Madrid. Podría seguir allí. Fuera de ese organigrama queda el actual director de Caixa Galicia, José Luis Méndez. En el consejo de ayer, el presidente de la caja, Mauro Varela, dio cuenta de que dejará de tener ese cargo en cuanto se apruebe la fusión, en la asamblea de septiembre u octubre. También aseguró que renuncirá a la indemnización que le correspondería por el cese como director general. En todo caso, podría seguir como empleado de la caja, pero su futuro a partir de entonces es una incógnita. En septiembre cumple 65 años. Lo que queda pendiente El protocolo pactado ayer establece un consejo con 22 miembros entre los 40 actuales de las dos cajas. El criterio para elegirlos no está todavía marcado. Habrá una primera copresidencia, durante 18 meses, para Caixanova, y lo relevará un miembro de Caixa Galicia pasado ese tiempo. Se da por seguro que el primero será Julio Fernández Gayoso, pero el segundo se ignora. Porque no se han puesto aún nombre a los 22 miembros del consejo fusionado. Se decidirá en verano. Y habrá 4 vicepresidentes, dos para cada entidad, también sin decidir. Todo paritario e intercambiable a los 18 meses. Tampoco está decidida la sede de la obra social ni de la corporación industrial, ni quién estará al frente de la segunda.