España se prepara para socorrer a los bancos y cajas peor puntuados en los test de solvencia
ECONOMÍA
El Gobierno pedirá una prórroga del FROB antes de que se publiquen las pruebas de esfuerzo el próximo día 23. Trichet pide el fin del «monopolio global» de las agencias de calificación.
14 jul 2010 . Actualizado a las 02:00 h.La publicación el próximo día 23 de las pruebas de solvencia de la banca europea puede poner en dificultades a muchas entidades si los test de esfuerzo a los que han sido sometidas no las dejan en buen lugar. Y España quiere cubrirse las espaldas para facilitar ayudas a bancos y cajas si dentro de diez días una nueva oleada de dudas financieras amenaza su estabilidad.
La vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Elena Salgado, anunció ayer en Bruselas que España pedirá a la Comisión Europea una prórroga del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), el mismo instrumento que va a financiar la fusión de las cajas gallegas, para hacer frente a esa hipotética situación de riesgo. El fondo, cuya vigencia expiró el pasado día 30, está dotado con 9.000 millones de euros, pero Bruselas admite que pueda aumentarse hasta en diez veces su tamaño inicial. Es decir, 99.000 millones, una cantidad «muy sobrante», en palabras de Salgado, para cubrir las necesidades de recapitalización del sistema financiero. Para curarse en salud, el Gobierno ha incluido en la nueva ley de cajas la previsión de que el FROB financie operaciones que no impliquen una fusión.
Las pruebas de esfuerzo miden la capacidad de los bancos para responder ante un escenario económico catastrófico, con caídas del PIB de más de tres puntos durante dos años por debajo de las previsiones de la Comisión Europea, y con graves crisis de la deuda soberana que incluyen la quiebra de países de la eurozona.
Hasta ahora esos balances no se habían hecho públicos por miedo a que se propagaran temores injustificados si trascendía la exposición de los bancos a un riesgo más forzado que probable. Pero los líderes de la UE acordaron en junio levantar el secreto este mismo mes, y lo hicieron a petición del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien quiso así poner fin a los rumores sobre los presuntos problemas del sistema bancario español.
Según el Ejecutivo, las dos grandes entidades de España, el Banco de Santander y el BBVA, están precisamente en los primeros puestos del ránking de las entidades mejor preparadas para un crac catastrófico, al contrario de lo que sucedería con muchos otros bancos, como los alemanes. Ayer, Salgado, quien asistió en Bruselas a la reunión del Consejo de Ministros de Economía y Finanzas (Ecofin), recordó que el FMI ha calculado que, ante una situación como la que dibujan los test de estrés, las cajas españolas podrían necesitar unos 17.000 millones, y los bancos otros 5.000. Dado que, según la vicepresidenta, ya se han empleado 14.000 millones del FROB y del Fondo de Garantía de Depósitos, las necesidades adicionales no serían «demasiado importantes». Salgado aseguró también que espera que la Comisión Europea dé el visto bueno a la prórroga de manera «inmediata».
Agencias
Por otro lado, el presidente del Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet, reclamó ayer el fin del «oligopolio global» de las tres grandes agencias de calificación, Fitch, Moody's y Standard&Poors. En una entrevista al diario francés Liberation, explica que el hecho de que esas agencias copen el 90% del mercado de la evaluación de riesgos contribuye a «amplificar» las oscilaciones del mercado.