Caixanova retira del mercado su plan para vender el Banco Gallego

Rubén Santamarta Vicente
Rubén Santamarta REDACCIÓN/LA VOZ.

ECONOMÍA

Dice ahora que es «una inversión estratégica», pese a que varios bancos habían recibido ya una oferta oficial

22 oct 2010 . Actualizado a las 02:38 h.

Caixanova acaba de retirar del mercado su plan para vender la participación que ostenta en el Banco Gallego, una entidad de la que es el primer accionista desde que en el año 1998 entrara en esta firma con un desembolso de 90 millones de euros. Mantiene hoy el 49,8% de la sociedad. Fue la propia caja la que ayer, de forma indirecta, confirmó esa salida del mercado a través de un comunicado. «En ningún momento ha existido planteamiento alguno en relación a una posible desinversión en el banco, Caixanova se encuentra plenamente satisfecha de la trayectoria del banco y de su gestión», explicó ayer esta financiera. Sin embargo, fuentes financieras aseguran que, al menos desde hace un año, la caja comenzó a moverse para colocar esa entidad en otras manos. Dos bancos, que prefieren no dar a conocer su nombre, aseguran haber recibido el cuaderno de venta hace algo más de medio año, y haber recibido una oferta. De hecho, se le encargó a dos entidades extranjeras de inversión, Goldman Sachs y Nomura, colocar ese paquete en el mercado. Estas dos marcas eludieron ayer confirmar o desmentir ese mandato. Sin embargo, ninguna operación llegó a fructificar, principalmente por su precio. Inicialmente, según diferentes analistas, el precio puesto por Caixanova estaba en torno a los 600 millones de euros, el valor contable de la entidad. Esa cifra ha ido bajando hasta rondar entre 260 y 300 millones de euros. En todo caso, son cantidades que, estando como está el mercado, aún saliendo de la crisis financiera, no se antojaba fácil de lograr. Otras fuentes aseguran que ese precio para un banco medio-pequeño como el Gallego, con 4.500 millones de euros en activos, sigue siendo «muy elevado». Además de lograr plusvalías con esa operación, a Caixanova desprenderse del Gallego le permitiría mejorar su eficiencia y reducir la morosidad. Con todo, esa posible venta del Gallego no se llegó a analizar en el consejo de administración de esa entidad. «No hay nada», insistían también ayer altos directivos del Banco Gallego en A Coruña, donde se encuentra su sede central operativa (la social está en Santiago). Este banco ganó hasta junio 536.000 euros, un 27% menos que en el 2009. Ante las dificultades para dar salida a esa participada, Caixanova decidió retirarla del mercado. Se desconoce si volverá a sacarla. Para la entidad se trata ahora de «una inversión estratégica dentro de la cartera de participaciones». Algo similar dijo verbalmente sobre Reganosa y semanas después anunció la venta de su participación, junto a Caixa Galicia, que finalmente no se concretó. La operación para desprenderse del banco es anterior a la alianza entre Caixa Galicia y Caixanova, que tendrá que afrontar la desinversión de hasta 12.900 millones entre participaciones industriales y oficinas, para lo cual se cuenta, precisamente, con Goldman Sachs como mediador. En eso están hoy centradas las cajas, para las que, pese a todo, interesa contar con una ficha bancaria para cualquier posible operación futura, como una ampliación de capital. Posición del Sabadell Ayer, al consejero delegado del Sabadell se le preguntó abiertamente si estaría interesado en hacerse con el Gallego. Durante la presentación de resultados (el Sabadell ganó 340 millones, un 27% menos que un año antes), Jaume Guardiola aseguró que el banco está «interesado en crecer aprovechando oportunidades», recalcando indirectamente la importancia que le dan a Galicia para ganar tamaño y cuota, pero sin entrar en nombres. La respuesta va en el mismo sentido que lleva expresando este banco desde hace casi un año.