Traspasa su negocio a Criteria, su brazo industrial que cotiza en Bolsa
28 ene 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La Caixa ha decidido renunciar a la naturaleza que va explícita en su nombre. La primera entidad de ahorros de España ha optado por traspasar todo su negocio a un banco (en realidad dos) y, de esta forma, proceder a la reconversión total que desde hace semanas esperaban en el sector. Para ello aprovechará la estructura de su brazo industrial con participaciones muy relevantes (de Repsol a Gas Natural) y que cotiza en Bolsa. Criteria pasará así a denominarse Caixabank, que estará controlado en un 81,1% por la primera caja catalana. El 18,9% restante quedará en manos de los accionistas minoritarios de Criteria, que con este cambio se convierte en uno de los principales grupos bancarios de España y en el décimo de la eurozona.
La operación, que está previsto que se cierre en agosto del 2011, se llevará a cabo a través de un intercambio de activos: Criteria traspasará a La Caixa la mayoría de sus participaciones industriales (valoradas en 7.471 millones) y se quedará a cambio la plantilla de La Caixa y el negocio bancario de la entidad de ahorros. Para compensar a La Caixa por el mayor valor del negocio bancario traspasado (9.480 millones), Criteria deberá dar a la entidad acciones por un importe de 2.009 millones de euros, que saldrán de una nueva ampliación de capital.
No obstante, pese al acuerdo de traspaso de participaciones, habrá excepciones ya que Criteria mantendrá el 5% de Telefónica y el 13% de Repsol.
Además, el nuevo Caixabank se quedará todo el negocio asegurador y las participaciones en los bancos internacionales.
Por su parte, La Caixa, que seguirá existiendo, retendrá las participaciones en Gas Natural Fenosa (35% del capital de la energética), Abertis (24,6 %), Agbar (24 %), BME (5 %) y Port Aventura, entre otros, cuyos dividendos servirán para mantener la actividad de la obra social y de la fundación. Todas esas participaciones pasarán a una nueva entidad, de la que colgarán también todos los activos inmobiliarios de La Caixa (que no se transmiten a Caixabank), así como las participaciones en Metrovacesa y Colonial.
Requisitos superados
Según los responsables de la entidad, Caixabank tendrá un core capital o capital básico del 10,9%, según la actual normativa de solvencia conocida como Basilea II. Con las normas de Basilea III, cuyo cumplimiento quiere adelantar el Gobierno pese a que no entrará en vigor hasta el 2013, la nueva entidad tendrá una ratio superior al 8%, y se ajusta así a las exigencias de Salgado. Desde hace semanas, en la sede barcelonesa de la Diagonal se venían estudiando las posibilidades de futuro. Tal era la rumorología que ayer mismo la Comisión Nacional del Mercado de Valores suspendió la cotización de Criteria cuando, una hora después de que la Bolsa abriese las puertas, sus acciones ya subían más de un 3%.
Difícil de imitar
La nueva estructura bancarizada de La Caixa marca un hito en la historia de las cajas. Pero, debido a su complejidad, es difícil que otras entidades puedan copiar sus pasos.