La incertidumbre sobre Italia y Portugal tumba la deuda española

juan oliver REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Las dudas sobre la solvencia de la banca italiana agudizan la crisis del euro

09 jul 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La incertidumbre sobre Portugal y la tormenta desatada en la eurozona por las últimas evaluaciones de las agencias de calificación, unidas a los malos datos de empleo en Estados Unidos y a las dudas sobre la solvencia de la banca italiana, desataron ayer una nueva jornada de pánico financiero de la que España salió escaldada.

El Ibex 35 cayó un 2,53 % y cerró su peor semana desde noviembre. Y en el mercado secundario de deuda, la prima de riesgo española (la diferencia de rentabilidad de sus bonos a diez años con respecto a los alemanes) se aupó sobre los 284 puntos. Es decir, que los inversores los consideran productos más arriesgados, y como compensación exigen un 2,84 % de rentabilidad sobre los germanos.

Al contrario, el interés de estos cayó varias décimas, renovado su carácter de valor refugio tras una semana en que la rebaja de la nota de Portugal por parte de Moody?s y las advertencias de Standard and Poor?s s sobre el segundo rescate griego devolvieron la crisis de deuda a sus peores momentos.

En la actividad inversora se dejó sentir la noticia de que el desempleo sigue subiendo en Estados Unidos (un 9,2 % en junio, una décima más que en mayo), y también la rebaja de las notas de cuatro bancos portugueses (de nuevo Moody?s). Pero, sobre todo, se acusó la incertidumbre sobre Italia, firme candidata a nueva víctima de los ataques a la periferia del euro.

La debilidad del ministro de Finanzas, Giulio Tremonti, envuelto en un escándalo de corrupción, el anuncio de Berlusconi de que no volverá a presentarse a las elecciones y las malas calificaciones de varias entidades financieras en vísperas de los test de estrés de la UE dispararon la prima de riesgo italiana hasta los 247 puntos, el nivel más alto desde la entrada del país en el euro.

La extensión de la crisis de deuda la cuarta economía de la UE añade un serio obstáculo a la estabilización de la eurozona. Aunque la canciller alemana, Angela Merkel, se mostró optimista en televisión, y ni siquiera citó a Italia cuando mostró su convencimiento de que tanto Portugal como Grecia superarán sus problemas.