El anuncio de la agencia Moody?s de que estudia rebajar la nota de la deuda soberana de España provocó ayer un nuevo encarecimiento de los bonos españoles en el mercado secundario. Su diferencial con los títulos alemanes a diez años (la prima de riesgo) llegó a auparse a los 360 puntos básicos, el máximo semanal, para relajarse luego en el entorno de los 354. Desde el 1 de julio, la prima de riesgo, que mide el sobrecoste que los inversores exigen por adquirir deuda española y no alemana, la más segura y rentable, ha crecido casi un 50 %.
En la escala de Moody?s, el riesgo español está ahora en Aa2, la tercera mejor nota de la agencia, cuyos analistas, sin embargo, consideran que los problemas de financiación y las dudas sobre el rescate de Grecia les obligan a ponerla en cuarentena. La vicepresidenta económica, Elena Salgado, reconoció ayer que se trata de una «mala noticia», aunque recordó que se trata solo de una advertencia que no se haría efectiva hasta dentro de tres meses.
Lo cierto es que ese argumento de la mayor vulnerabilidad de la economía española también ha servido a Moody?s para advertir de que podría también rebajar la nota de cuatro bancos, incluidos los dos grandes: Santander BBVA, CaixaBank y La Caixa. Además recortó la calificación de seis comunidades autónomas (Andalucía, Castilla y León, Murcia, Castilla La Mancha, Valencia y Cataluña) y anunció que estudiaba revisar a la baja las de otras cuatro: País Vasco, Extremadura, Galicia y Madrid.
La revisión deja a Galicia con la segunda mejor calificación de las comunidades analizadas, solo por detrás del País Vasco, por encima de Cataluña y Valencia y al mismo nivel que la nota global de España.
Resultados sólidos
Moody?s considera que aunque Galicia ha soportado la crisis con «sólidos resultados financieros», su solvencia «sigue dependiendo significativamente de las transferencias del Gobierno central», y que no tiene «ni la maniobrabilidad fiscal ni la fortaleza institucional requerida para un rating por encima» del del conjunto del Estado.
Fuentes de la consellería de Facenda confirmaron ayer que el nivel otorgado por Galicia «es el máximo en el que puede estar», y que la posibilidad de que Moody?s lo rebaje «depende de lo que haga con España».