Capitales gallegos sondean refugios seguros fuera del euro

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Corona noruega, libra esterlina y franco suizo son las divisas más demandadas

08 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El euro afronta momentos decisivos para su futuro y la incertidumbre ya se ha trasladado a la calle y a las oficinas bancarias. Entidades financieras consultadas por La Voz reconocen que el número de clientes que realizan consultas sobre la seguridad de sus ahorros ha ido en aumento durante las últimas semanas. «Existe el temor a que el euro no sobreviva a la crisis de la deuda soberana. La pregunta es siempre la misma: ??¿Qué pasaría con los ahorros en euros si volviera la peseta???», afirma el responsable comercial de un grupo financiero internacional con sedes en las principales ciudades gallegas.

Explica que, «aunque les aseguramos que no hay motivos para ponerse en esa tesitura», a raíz del agravamiento de la crisis en la eurozona sí es perceptible el aumento de clientes que buscan refugio para sus fortunas fuera del euro.

«Lo que percibimos es mayor preferencia hacia la corona noruega, el franco suizo y la libra esterlina», aclara.

¿Por qué la corona noruega y no el dólar? «El dólar también, aunque se considera muy alineado al futuro del euro. Sin embargo, la divisa nórdica es una apuesta de cobertura ante el riesgo de la eurozona, a lo que hay que sumar la evolución alcista del precio del petróleo, que hay que recordar que es el principal producto de exportación de Noruega», afirma.

Ingresos considerables

«Viene gente que me pregunta cómo abrir cuentas corrientes en Alemania», explica el comercial de otra multinacional bancaria asentada en Galicia. «Es relativamente sencillo, se puede abrir desde un banco alemán que opere en España, aunque requiere unos ingresos considerables para realizar la gestión», aclara el experto.

Además de la divisa y el siempre recurrido valor seguro del oro, existen otros refugios más sencillos y menos costosos en pleno auge, como un fondo de inversión monetario o la compra de acciones. «Aquí es importante que tanto los fondos como las acciones no estén domiciliados en España», aconseja.