
Todos los partidos se han opuesto a imponer una tasa a los ahorradores como exigió el Eurogrupo, salvo la formación del presidente del Gobierno, que se abstuvo
19 mar 2013 . Actualizado a las 22:57 h.El Parlamento de Chipre rechazó hoy por amplia mayoría el impuesto a los depósitos privados planteado por el Eurogrupo, pese a que el Gobierno había presentado una versión suavizada que dejaba exentos los ahorros inferiores a 20.000 euros. Todos los partidos votaron en contra del borrador de ley, con excepción del gubernamental DISY, que se abstuvo. De modo que hubo, 39 votos contrarios al plan, 19 abstenciones y ninguno a favor. «El proyecto ha sido rechazado», dijo el presidente del Parlamento, Yiannakis Omirou. El resultado de la votación fue recibido con una enorme explosión de júbilo por parte de miles de manifestantes reunidos ante el Parlamento.
Las intervenciones en el debate previo estuvieron todas marcadas por un tono de dura crítica hacia las decisiones del Eurogrupo. Así, el presidente del Parlamento, Yannakis Omirú, habló de un «atraco a la propiedad privada, contra toda noción del Derecho». Omirú afirmó que los socios europeos se han pronunciado a favor de que Chipre vuelva «a ser un país de soberanía limitada, un estado neocolonialista». El presidente del Parlamento y miembro del partido socialdemócrata EDEK pidió respaldar al presidente, Nikos Anastasiadis, en «todo esfuerzo por renegociar la decisión». Fue el propio Anastasiadis quien, en un comunicado publicado mientras se celebraba el debate, anunció su intención de «continuar luchando para que las decisiones del Eurogrupo se modifiquen».
Al amplio rechazo parlamentario se había sumado el centrista DIKO, que respalda a Anastasiadis, y que en un principio había manifestado su intención de respaldar el proyecto de ley. Sin embargo, el fuerte rechazo popular y el revuelo político causado por este plan, acabó llevando al presidente de DIKO, Marios Karoyan, a sumarse al «no». «No permitiremos convertirnos en otra Grecia. No aceptamos ser los parias de Europa», dijo Karoyan en su discurso cargado de emoción, para añadir que «frente a la Europa del chantaje nosotros insistimos en la Europa de la solidaridad».
Incluso el líder conservador, Averof Neofitu, fue crítico con el Eurogrupo, y pese a reprochar a los partidos que se oponen al plan no presentar alternativas, dijo que «tanto los dirigentes, como los ciudadanos tenemos razón en sentir ira por la manera que fue tratado el presidente Anastasiadis» en Bruselas. Neofitu anunció que el próximo paso ahora será formular «una propuesta alternativa realista que pueda salvar a nuestro país», una iniciativa que, a su juicio podría obligar a los socios europeos a reexaminar el tema.
Reunión de los líderes mañana
El presidente Anastasiadis había dado ya de antemano por hecho que el Parlamento rechazará el impuesto especial y por ello convocó para mañana a los líderes de los grupos parlamentarios. «Con el objetivo de examinar alternativas para enfrentar la situación que se va a crear después la sesión de hoy en el Parlamento, el presidente ha convocado una reunión con los líderes de los grupos parlamentarios mañana, 20 de marzo, a las 11.00 horas», informó un comunicado difundido por la Presidencia antes del debate.
El Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) instaron hoy a las autoridades de Chipre a cumplir los compromisos adquiridos y apoyaron la decisión de aplicar un impuesto progresivo a los depósitos para proteger a los pequeños ahorradores. El BCE considera que «son las autoridades chipriotas las que deben decidir cómo se va a financiar el programa para asegurar» los 5.800 millones de euros que Chipre ha de aportar al rescate.
El Eurogrupo aprobó en la madrugada del sábado un gravamen del 6,75 % a todos los depósitos bancarios en Chipre hasta los 100.000 euros y del 9,99 % para los de cantidades superiores. Ahora una nueva propuesta del Gobierno de Nicosia, que debe ser aprobada en el Parlamento, propone que la quita del 6,75 % se aplique sólo a las personas con ahorros de entre 20.000 y 100.000 euros.
Indignación en las calles
Las condiciones del rescate de Chipre han despertado la indignación no sólo de los nativos de Chipre, sino también de los residentes extranjeros, pues actualmente no tienen acceso a sus cuentas bancarias más que a través de cajeros automáticos.«Siete años trabajando, sin vacaciones, sin caprichos, una vida casi austera por un futuro mejor fuera de mi país, para tener ahorros por lo que pueda pasar, para que ahora nos lo quiten de la noche a la mañana», asegura Ruth Toribio, una española que vive en Chipre. «Otros viven la vida, invierten nuestro dinero, pierden y nosotros tenemos que pagar el pato. Es los mas injusto que uno se pueda imaginar», agregó indignada.
En las calles de Nicosia, la gente se mueve con cautela a la hora de hacer compras ante el peligro de quedarse sin dinero, ya que los bancos se mantendrán cerrados al menos hasta el jueves.
«Hoy es martes, pero como si fuera domingo. Así nos dicen los bancos, a la vista de que el Banco Central ha declarado el martes y el miércoles días festivos» para las entidades, declaró Doros Theodoru, propietario de una tienda de ropa. Se trata, añadió el comerciante, de «los peores días en los veinte años que hago este trabajo. No podemos comprar a crédito a los proveedores en el extranjero. La psicología del mercado ha muerto porque somos un país importador».