Novagalicia recurre el fallo que lo obliga a devolver lo cobrado por la cláusula de suelo

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ECONOMÍA

Es probable que en el recurso, la entidad se respalde en la información facilitada en el momento de la firma del contrato y recogida en el mismo

26 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Novagalicia Banco anunció ayer que recurrirá la sentencia del Juzgado de lo Mercantil de Bilbao que le obliga a devolver 11.973 euros a una pareja de Vizcaya por los intereses que cobró de más en su hipoteca, teniendo en cuenta la cláusula suelo y techo que se le estaba aplicando. En concreto, el contrato recogía que los intereses no podrían superar el 9,75 % y tampoco ser inferiores al 3,25, y la pareja decidió acudir a los tribunales al entender que no se estaba beneficiando de toda la bajada del indicador de referencia de su hipoteca, el euríbor.

Transparencia del contrato

El fallo judicial hace referencia a la transparencia de las cláusulas contenidas en el contrato. En este sentido, la entidad entiende que en el pacto objeto de la sentencia no hay ningún tipo de duda respecto a lo firmado por los contratantes.

La decisión del Juzgado de Bilbao está firmada por Agustí Bassols, quien hace referencia a un fallo del Tribunal Supremo contra el BBVA, Cajamar y Novagalicia, que los obliga a retirar todas sus cláusulas suelo, pero no a devolver los intereses con efecto retroactivo. ¿El motivo? Una medida de ese tipo pondría en peligro la supervivencia de buena parte del sistema financiero español.

Información

Es probable que en el recurso, Novagalicia se respalde en la información facilitada en el momento de la firma del contrato y recogida en el mismo. Aunque la entidad no ha querido dar detalles, es previsible que el juez que estudie el recurso tenga en cuenta si en el pacto firmado entre las partes se explica específicamente qué son y a cuánto se elevan las cláusulas suelo y techo, los topes mínimos y máximos de los intereses a lo largo del período de la vida del préstamo.

El contrato había sido firmado entre Caixa Galicia y los afectados en el 2006, año en el que los consumidores no eran conscientes de la evolución que podría desarrollar el índice de referencia más utilizado en España.