La reforma laboral aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy ha promovido la precariedad del mercado laboral y ha instaurado el modelo unilateral de negociación colectiva a favor del empresario, según la opinión mayoritaria de los grupos de la oposición en el Congreso que interpelaron ayer a Fátima Báñez.
Concha Gutiérrez, portavoz socialista, criticó el informe sobre la reforma presentado por la ministra y lo tachó de «alejado de la realidad». «El PP carece de una estrategia de empleo que nos acerque a un crecimiento inteligente, sostenible e inclusivo», dijo, antes de señalar que la norma «ha instaurado el modelo unilateral de principios del siglo pasado». Y terminó recordando que su partido quiere una evaluación de la reforma laboral realizada por expertos independientes.
El portavoz de la Izquierda Plural, Joan Coscubiela, advirtió de «elementos de manipulación» en el informe e insistió en que «la realidad es que hay 600.000 desempleados más y 800.000 ocupados menos». Coscubiela subrayó que «la moderación salarial no ha servido para frenar el paro, sino para mejorar los beneficios empresariales».
Carles Campuzano (CiU) se desmarcó del resto de la oposición y dijo que la reforma laboral «ha servido para atenuar los golpes de la crisis». El representante del PNV, Emilio Olabarria, advirtió por su parte que las causas de despido que recoge la norma hacen que «se parezca mucho al despido libre y barato, y esto no puede servir para crear empleo». La diputada de Geroa Bai, Uxue Barkos, dijo que las afirmaciones del informe son «tan arbitrarias como bondadosas con la realidad».