La Caixa, el BBVA y los fondos irán a la privatización de NCG

Sofía Vázquez
Sofía Vázquez REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

También se presentará el Santander, aunque con menor interés

11 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La venta de Evo ha dado, en la práctica, el pistoletazo de salida para la venta de Novagalicia Banco. Ayer el presidente del FROB, Fernando Restoy, indicó en el Congreso que BNP ya tiene «prácticamente finalizado el proceso de análisis previo a la toma de decisión sobre el inicio de posible proceso competitivo, que se prevé en su caso pueda iniciarse los últimos días de septiembre». Dicho así se apunta como una posibilidad, pero lo cierto es que a finales de mes se iniciará ese proceso de privatización de la entidad financiera gallega, que cuenta con una cuota de mercado de más del 40 % y financia una de cada dos hipotecas en Galicia, y a este proceso se presentarán La Caixa, el BBVA y los fondos de inversión extranjeros capitaneados por el norteamericano Guggenheim.

También acudirá al proceso competitivo el Santander, banco presidido por Emilio Botín, aunque según indicaron fuentes financieras «no lo hace con demasiado interés», ya que es posible que opte a la adjudicación de Catalunya Caixa.

El hecho de que el FROB, a través de los gestores de NCG, haya logrado vender Evo por 60 millones de euros y sin ninguna ayuda pública -la primera vez que sucede desde el inicio de la reestructuración del sistema- ha puesto en alerta al resto de la banca nacional, que teme perder una presa muy sabrosa: NCG sigue ganando cuota de mercado en créditos y depósitos en un año que ha sido azotada con dureza por la crisis de las preferentes. El FROB le impuso como condición a los aspirantes a Evo una fuerte aportación de capital, y Apollo se comprometió a desembolsar 160 millones. Este requisito también puede ser una condición sine qua non para quedarse con NCG. Ayer el ministro Luis de Guindos reiteró que el Gobierno se reafirma en su objetivo: la venta de Novagalicia pasa por recuperar «el máximo posible» de dinero público destinado a su saneamiento. Medido en créditos fiscales, la venta de la entidad sería 2.000 millones más barata si es a los fondos.