Aparentemente, el de las preferentes y subordinadas en el Banco Gallego es un problema menor para el Sabadell, por su escaso volumen y porque apenas se colocaron a pequeños clientes. Pero no deja de ser un problema. Por ello la entidad catalana ha propuesto a los clientes canjear esos productos, tras la quita obligatoria -viene impuesta por Bruselas, como a todas las entidades nacionalizadas- por unas obligaciones convertibles. Este es un producto de capital que da un interés anual (un 5 % en este caso) y que se termina canjeando por una acción del Banco Sabadell. Según esta entidad, y tomando una valoración de expertos independientes, los clientes minoristas que opten por esta vía, tras una quita del 16 %, terminarán recuperando todo el dinero gracias a esa rentabilidad del 5 %. Sostiene el Sabadell que es la mejor alternativa dada a clientes de un banco nacionalizado por la posibilidad de recuperar el dinero perdido con la quita.
El Gallego no vendió preferentes a minoristas, pero sí otro producto similar -de hecho, en la calle se equipara un caso con el otro-, la obligaciones subordinadas. En total fueron unos 64 millones de euros.
El importe máximo de emisión de esas convertibles es de 61,2 millones de euros, y se emitirán el próximo día 28, es decir, en vísperas de que el Sabadell tome oficialmente las riendas del Gallego.