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Bruselas aplaude la venta de NCG y pide que ahora reactive el crédito

Rubén Santamarta Vicente
Rubén Santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Joaquín Almunia ha tutelado en Bruselas la venta de NCG.
Joaquín Almunia ha tutelado en Bruselas la venta de NCG. o. oslet < / span>efe< / span>

Cree «positivo» recuperar 1.000 millones con la operación de Banesco «dado el difícil entorno al que se enfrentan los bancos españoles»

16 ene 2014 . Actualizado a las 12:13 h.

La venta de NCG, o Novagalicia, al grupo financiero venezolano Banesco ha sido recibida en Bruselas con los brazos abiertos. Es una operación que ha supuesto recuperar 1.003 millones, o perder 7.978, como se prefiera, y que la Comisión Europea ha vigilado atentamente porque en el 2012 le inyectó a la entidad gallega casi 5.500 millones del rescate bancario. «La Comisión ha estado informada en todo momento de este proceso», explican fuentes oficiales de la Dirección General de Competencia, la que se encarga de velar por las operaciones bancarias cuando hay en juego ayudas públicas.

La subasta, la segunda en la que el FROB obtiene algo más de un euro por un banco (la anterior por la venta de Evo, precisamente filial de NCG), se valora en los despachos de la capital comunitaria «de forma positiva». Es la primera vez que se expresa en estos términos, casi un mes después de que se acordara que Banesco era el ganador en un proceso «competitivo, abierto y transparente», explican esas fuentes.

Sin citar al comprador, Competencia sostiene que la venta «acelerará el proceso de reestructuración de NCG», para el que están pendientes aún varios puntos del plan aprobado por Bruselas (cierre de oficinas) hace 14 meses. Creen además en Europa que la entrada de un accionista privado tiene que servir, además, para que comience a fluir el crédito a familias y empresas: «La venta acelerará el proceso de reestructuración de NCG y consecuentemente la recuperación del flujo de crédito para la economía real».

Cambiar la hoja de ruta

La operación, explican las mismas fuentes, ya ha sido «notificada oficialmente» a Bruselas. Otra cosa es que ya se haya terminado todo el procedimiento oficial. Aún falta la autorización formal de la Comisión de los Mercados y de la Competencia y también el de la propia Dirección General de la Competencia de la UE. Teniendo en cuenta que ha habido contactos fluidos entre el FROB, el Banco de España y NCG con Bruselas, no se esperan sorpresas.

Otra cosa es el margen que tenga Banesco para cambiar esa hoja de ruta -el plan de reestructuración- una vez que se haga con las riendas de NCG (en torno a marzo o abril). Porque la UE lo tiene claro: «Inicialmente, el comprador de NCG Banco debe seguir el plan de reestructuración aprobado por la Comisión Europea». Ese «inicialmente» abre la puerta a posibles cambios, que no se descartan por parte del grupo del magnate Juan Carlos Escotet. Si Banesco quiere hacer algunas modificaciones «puede proponerlas a la Comisión, que estudiará y valorará esos cambios a la luz de la ayuda recibida por el banco», apuntan esas fuentes oficiales.

Por ahora, el equipo de Banesco y del Banco Etcheverría -su marca en España- no han fijado una fecha para esa cita en Bruselas, aunque está en sus previsiones presentar su plan de negocio. Porque, por ejemplo, el marco de trabajo fijado para NCG impide determinadas políticas comerciales, concesión de crédito a negocio inmobiliario, obliga a vender participadas...

Perder 8.000 millones

¿Y cómo se ve en Bruselas recuperar solo 1.000 de los casi 9.000 millones inyectados en Novagalicia? La sensación es coincidente con la del ministro Luis de Guindos. «La recuperación de unos 1.000 millones de euros es positiva, dado el difícil entorno al que los bancos españoles se están enfrentando», apuntan en Competencia. Es la cifra más alta en una subasta pública de las nueve organizadas hasta la fecha. Lo que no se cuestionan en la UE es la idoneidad de esa cantidad de dinero público metida en la firma gallega: «Esta inyección se realizó para evitar el colapso del banco y cubrir pérdidas que se habían generado en el pasado. Ese colapso hubiera sido un desastre para el sistema bancario y la economía española, y habría tenía un coste mucho más alto».

Mientras, sigue el intercambio de información entre Banesco, NCG y FROB para proceder a la integración. Hay un equipo de 6 personas negociando, con dos ejecutivos del Fondo de Rescate; el responsable del área jurídica de Novagalicia, Eduardo Álvarez-Naveiro; y tres directivos de Banesco, que van rotando. Están el propio Escotet, Francisco Botas (consejero delegado del Etcheverría y futuro primer ejecutivo del banco resultante) y Ricardo Ayala (miembro de Banesco USA).