La nueva normativa de titulaciones náuticas entra hoy en vigor
11 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El pesquero Mar de Marín colisionó en abril del año pasado contra un buque mercante en la entrada de la ría de Vigo con el fatal desenlace de cinco tripulantes fallecidos. El patrón era un profesional con mucha experiencia, por lo que el accidente fue tan trágico como incomprensible. La Asociación Gallega de Enseñanza Náutica vaticina que aumentarán las posibilidades de que se repitan este tipo de siniestros, debido a la entrada en vigor de la nueva normativa para la obtención de titulaciones náuticas, que permite que patrones con poca experiencia y formación gobiernen barcos de 24 metros de eslora.
Este es el aspecto más controvertido de la nueva normativa que entra hoy en vigor.
La orden ministerial aprobada en el año 2007 que hasta ahora era la que se aplicaba fijaba en 12 metros la longitud máxima de los barcos que podían gobernarse con el título de patrón de embarcaciones de recreo. En adelante, esta medida pasa a ser de 15 metros, pero con una práctica de 24 horas los patrones de embarcaciones de recreo quedan habilitados para poder gobernar barcos de una envergadura vedada hasta ahora a los profesionales.
El cambio de la normativa se ha sometido a la audiencia de los interlocutores sociales más representativos de los sectores afectados y a informe de las comunidades autónomas con competencias para el otorgamiento de las titulaciones náuticas para el gobierno de las embarcaciones de recreo. Asimismo ha sido sometido a informe de los ministerios de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, de Empleo y Seguridad Social, del Interior, de Defensa, de Economía y Competitividad y de Educación, Cultura y Deporte.
«Una temeridad»
En Galicia, ha contado con el rechazo frontal de la asociación gallega de empresas de enseñanza náutica. Su presidente, el baionés Luis Corbacho Sampedro, considera que es una temeridad dejar en manos de patrones inexpertos embarcaciones grandes que hasta ahora gobernaban profesionales y con mayores exigencias.
Este cambio en la normativa nace para impulsar la industria náutica y que se incremente la demanda en los astilleros para la construcción de naves de mayor envergadura. «Pero una cosa es provocar el despegue de la náutica recreativa y otra es fomentar los siniestros y con esta norma lo que va a haber son más accidentes en el mar», aseguraba ayer este representante de las academias de náutica.
Corbacho considera peligroso que en adelante cualquier persona aficionada a la náutica recreativa que acabe de sacarse un título y de comprarse un barco de 24 metros de eslora pueda encontrarse en medio de los canales de entrada y de salida de una ría donde a diario entren y salgan mercantes, barcos de pesca o cruceros. La modificación de la norma viene dada también por la necesidad de llevar a cabo una actualización y simplificar los programas de las materias teóricas debido a que en los últimos años se han producido avances técnicos.