Una factura de una compañía de teléfonos de prestigio recoge perfectamente el siguiente dato: 23 euros por 27 minutos de una llamada. ¿Llamada? ¿A quién? Al 807 544 056
08 feb 2015 . Actualizado a las 19:09 h.Una factura de una compañía de teléfonos de prestigio recoge perfectamente el siguiente dato: 23 euros por 27 minutos de una llamada. ¿Llamada? ¿A quién? Al 807 544 056. Empezando por un 807 el usuario en cuestión podía haber sido más precavido y pensárselo dos veces antes de telefonear, al tratarse de «servicios de tarificación adicional» (así denominan legalmente), cuyo precio incluso puede llegar a cinco euros el minuto. Sin embargo, el hombre en cuestión no fue lo prudente que se esperaba de él. ¿Por qué? Porque anteriormente le habían enviado un mensaje en el que decía que tenía un préstamo concedido. Él no había pedido ningún crédito y con los tiempos que corren, explicaba, no quería tener ningún tipo de problema. Con la llamada pretendía zanjar cualquier duda. Al protagonista de esta historia lo retuvieron al teléfono los citados 27 minutos, pidiéndole todo tipo de datos. ¿Por qué lo retuvieron esos 27 minutos? Porque la legislación establece que, como máximo, la llamada de los servicios de tarificación especial solo puede durar 30 minutos. Expertos consultados indican que el descrito se corresponde con un tipo de timo muy antiguo pero que se ha sofisticado, ya que lo que se intenta es captar clientes a los que previamente se les ha alarmado o bien ofreciéndoles un préstamo, o un paquete, o cualquier tipo de servicio. Aunque parezca inaudito, hay incluso empresas que llaman y lanzan un conjuro a su interlocutor, que se ve enganchado así por el miedo.
Buena parte de los afectados telefonean al 807 para intentar resolver un problema e inmediatamente la compañía en cuestión empieza a facturar. Si el consumidor quiere expresar una queja lo puede hacer ante la Secretaría de Estado de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información (Setsi), por ejemplo. Sin embargo, el organismo que puede cortar por lo sano ese tipo de llamadas timo es la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC). La dualidad de instituciones -y procedimientos- para solucionar un mismo problema, que algunos expertos entienden que puede llegar a ser delito penal, hace que sea muy difícil para el consumidor abordar la queja. Otra fórmula para denunciar lo sucedido es acudir a las oficinas de Consumo. No tiene sentido, por el contrario, echarle la culpa a las compañías telefónicas, ya que se limitan a poner en contacto a usuarios.
La OCU advierte de que los números que figuran entre los de tarificación adicional están el 803, 806, 807 y 905. Dice además que al consumidor lo que más le interesa es la cuarta cifra del número, porque cuanto más alta sea, más se pagará. Si usted rastrea en Internet, son cientos los consumidores que han sido timados a través del 807 544 056. Han colgado su advertencia en la red para que otras personas no caigan en la trampa. Una trampa en la que se puede caer porque las empresas que operan a través de este número no suelen dar los tres dígitos seguidos (807 en este caso), sino que los vocalizan de dos en dos (80 75 44 0 5 6), intentando de esta manera engañar al consumidor. Si usted al final cae en la trampa, debe saber que pagará más si llama desde un móvil que desde un fijo. La factura del número 807 544 056 llegó el mes pasado a una casa familiar del centro de A Coruña. El viernes este periódico intentó contactar en varias ocasiones y este número ya no se encuentra operativo. Al menos por ahora.