Sargadelos se reinventa con una nueva línea de piel, joyería y textil, y un plan de expansión

ECONOMÍA

Busca inversores para asentarse en Madrid y Barcelona
16 oct 2016 . Actualizado a las 20:04 h.Sargadelos ha dejado atrás dos años muy complejos, está a punto de cerrar un 2016 de renovación, y el 2017 tiene que ser «un primer paso hacia algo más importante», dice su dirección. Un paso en el renacer de este emblemático grupo gallego, una señal de identidad de Galicia que estuvo contra las cuerdas y ve las cosas con algo más luz. Y ahora la firma que preside Segismundo García -máximo accionista, con alrededor del 70 % del capital- quiere conjugar su gran especialidad, la cerámica, con la entrada en otros segmentos y territorios.
Nadie trabaja la porcelana como ellos, con el horno a una temperatura altísima, que le permite presentar piezas con una profundidad única, que unido al color y el diseño hacen de Sargadelos una marca «con muchísimo peso», recuerda Alberto Moreda, director de ventas. Entre su clientela regular está, por ejemplo, la Casa Real, que utiliza alguna de sus piezas como regalo institucional.
Pero con la porcelana sola no basta. Ahora es el momento, entiende la dirección, de llevar a la empresa un punto más allá, probando otros negocios «sin perder de vista la marca, y la calidad, siempre máxima», recalca Moreda. Los planes de Sargadelos pasan por que antes de acabar este año -pensando, sobre todo, en la campaña de Navidad- puedan poner en el mercado sus primeros objetos de piel -trabajando sobre todo el cuero, con bolsos, por ejemplo-, joyería de alta gama y productos de textil. En esto último lo más inmediato será una colección de mantelería, siguiendo los diseños que han hecho célebre al grupo. Luego podrían continuar con toallas, delantales...

Fábricas «al 100 %»
Algo similar sucederá con la joyería, que la empresa quiere lanzar en los próximos meses, fundiendo piezas de oro y plata con su cerámica. Una vuelta de tuerca para seguir posicionando Sargadelos. Para ello ya cuenta con especialistas en joya, que trabajarán desde la factoría de Cervo, en A Mariña. Aunque, matiza Moreda, el grupo tiene previsto hacer una «importante inversión» tanto en esta factoría como en la de Sada. Las dos instalaciones, agrega, «son imprescindibles» y vuelven a contar con un volumen de fabricación cercano al máximo. «Ambas están prácticamente al 100 %», agrega. Una buena señal para mirar adelante.
El grupo ya testó nuevos productos hace unos meses. Para la campaña de verano puso en el mercado unos complementos -colgantes, principalmente- algo diferentes, una colección de porcelana llamada Océano. Eran 1.500 piezas que se agotaron en unas semanas.
La segunda pata de ese renacer de Sargadelos vendrá por la expansión, nacional e internacional, asentándose primero en dos grandes plazas: Madrid y Barcelona. Quiere hacerlo, explican en la dirección, contando con algún inversor que quiera montar ese espacio, porque los recursos del grupo, tras salir del concurso, son aún limitados.
Y mientras, la empresa prosigue con su proyecto hacia el exterior, y hace unas semanas ha llegado a un acuerdo con un punto de venta en Berlín para poder acceder a ese mercado en la capital alemana. Ya tiene otros 75 repartidos por medio mundo.