El ejecutivo gallego asegura que investigó con detectuves el fraude del IVA en la compañía
12 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.José María Castellano defendió ayer ante el juez su gestión al frente de ONO y aseguró que Vodafone, que adquirió la sociedad en el 2014, regularizó «problemas que no había» cuando pactó con Hacienda pagar casi 60 millones de euros por un supuesto fraude fiscal del que, dijo, no existía prueba alguna.
Durante casi dos horas, el ejecutivo gallego señaló que solo tuvo noticia de la presunta trama defraudatoria, vinculada al área de reventas internacionales de voz, en abril del 2014, cuando la Agencia Tributaria, en una inspección rutinaria, le comunicó que cuatro proveedores de ONO habían incumplido sus obligaciones fiscales. Unas sospechas que, puntualizó, Hacienda no acompañó de pruebas y que los propios gestores de la compañía investigaron, para lo que contrataron a un detective privado. La conclusión a la que llegaron es que todas las empresas con las que trabajaban habían pagado las correspondientes cuotas del IVA, como obraba en los certificados que expidieron al fisco.
Demandado por Vodafone junto a otros dos ex altos cargos de ONO (la ex consejera delegada, Rosalía Portela, y el exdirector financiero, Carlos Sagasta) por su presunta responsabilidad en el fraude del IVA por parte de varios de sus proveedores, Castellano señaló que el acta de conformidad con Hacienda «no debió haberse pagado nunca», y explicó que ofreció una alternativa a Vodafone, que «no contó para nada» con él. La multinacional británica fue condenada hace unos días a pagar 25 millones de euros a Castellano por el bonus correspondiente a la venta de ONO.