Rato: «El rescate de Bankia no fue culpa mía»

Ana Balseiro
ana balseiro MADRID / LA VOZ

ECONOMÍA

BENITO ORDOÑEZ

El exvicepresidente del Gobierno niega que hiciera «nada malo» en su gestión de la entidad y usa su comparecencia en el Congreso para ajustar cuentas con el Gobierno, al que acusa de querer meterlo «en la cárcel»

10 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El exvicepresidente del Gobierno y antiguo responsable del FMI Rodrigo Rato convirtió ayer su comparecencia ante la comisión del Congreso que investiga la crisis financiera y el rescate de las cajas en una plataforma no solo para exculparse de cualquier gestión equivocada al frente de Bankia -tras su presidencia, la entidad recibió 22.000 millones de dinero público, el rescate más cuantioso-, sino especialmente para ajustar cuentas con sus antiguos compañeros de partido. Las más de cuatro horas que duró su comparecencia -finalmente con preguntas y respuestas individualizadas- estuvieron trufadas de feroces acusaciones al Gobierno, y especialmente al ministro de Economía, Luis de Guindos. Además de defender su honorabilidad con un tono beligerante y soberbio ante los diputados, que le recordaron repetidamente su condena por las tarjetas black y sus procesos abiertos, el expresidente de la entidad señaló al Gobierno como responsable de un complot para meterlo en la cárcel.

la burbuja

Culpó al Gobierno de Zapatero por paralizar o revertir las reformas. Rato echó balones fuera. Y comenzó por la responsabilidad de las burbujas inmobiliaria y de crédito, que les imputó a los Gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero. Sostuvo que no continuaron con las reformas del PP y que eliminaron, por ejemplo, las provisiones contracíclicas para la banca, lo que disparó el crédito del 120 % del PIB al 210 %. «Fue su partido, no el mío, el que las quitó», le respondió al portavoz socialista Pedro Saura, para añadir que «fue una decisión irresponsable para evitar la expansión del crédito. ¡Y no hicieron ninguna reforma hasta el verano del 2010, cuando ya éramos el ejemplo de burbuja! Todo eso se dispara con ustedes. No me eche la culpa a mí».

LA FUSIÓN

Señala a Fernández Ordóñez. Otro punto en el que también negó responsabilidad fue al explicar por qué se creó Bankia fusionando las cajas más expuestas al ladrillo en lugar de otras sanas, como La Caixa, Unicaja o Kutxa. Aseguró que había sido el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, el que, cuando él presidía Caja Madrid, lo llamó a su despacho y lo obligó a incluir a Bancaja en el SIP que ya había formado con otras cinco cajas. También fue quien forzó la salida a bolsa. Precisamente, Rato está pendiente de juicio en la Audiencia Nacional por la salida al parqué de Bankia, una causa por la que se enfrenta a los delitos de estafa a inversores y falseamiento de cuentas, penados con hasta seis y tres años respectivamente.

Bankia

De Guindos, centro de su ataque. Aunque el exvicepresidente repartió culpas a diestro y siniestro, sus ataques más feroces tuvieron como blanco al ministro de Economía, Luis de Guindos. No solo lo acusó de estrenarse en el Ejecutivo provocando el desplome en bolsa de la banca española al anunciar que necesitaba 60.000 millones para sanearse, sino de colocar a las entidades al borde del precipicio con las exigencias de sus famosos «decretos Guindos» para provisionar el ladrillo.

Y fue más allá, al asegurar que orquestó el rescate de Bankia con bancos de la competencia, que luego se benefició de su caída, al captar los depósitos que salieron tras la nacionalización. «De Guindos me exigió la dimisión el 6 de mayo del 2012 y la acción se desplomó», dijo, argumentando que el proceder del ministro provocó la huida de 250.000 millones de España entre enero y septiembre de ese año, lo que lo forzó a «aceptar el único rescate que le ofrecieron». 

El rescate

Que lo explique Goirigolzarri. «Mi problema es que todos ustedes me juzgan por lo que pasó después con Bankia, por el agujero para crear la entidad más capitalizada de España. Yo no pedí esos 19.000 millones que, además, no me explico. Pregúntenle a los que lo hicieron». Rato, que aseguró que la reformulación de las cuentas de Bankia que dieron una pérdidas millonarias era ilegal, instó a la Cámara a pedir explicaciones al actual presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri, que fue quien pidió los 19.000 millones que el exministro consideraba innecesarios.

«Yo no me excuso con la CNMV o el Banco de España, es que no considero que se haya hecho algo mal. No digo que se hiciera algo malo y la culpa la tengan otros, lo que digo es que no se hizo nada malo», insistió en el discurso de que el rescate no era culpa suya, añadiendo que la salida a bolsa se hizo con todas las garantías. Afirmación esta tumbada ya por la Justicia.

La caza

«El Gobierno quería meterme en la cárcel». Uno de los momentos más sorprendentes de la comparecencia fue cuando Rato respondió al portavoz del PP, que decía sentir pena al ver cómo había acabado un gran ministro de Economía. «¿A usted le da pena? Más pena me da a mí, después de 30 años en el PP», espetó, tras asegurar que dos meses antes de que lo detuvieran, en abril del 2015, acusado de delito fiscal y alzamiento de bienes, «tres personas· lo avisaron de que el Gobierno lo quería «meter en la cárcel». Apuntó a los movimientos de De Guindos, Montoro e incluso Báñez para filtrar su situación fiscal. Pese a estar condenado por las black, rechazó ser un «político delincuente» y, cuando le afearon su soberbia ante la comisión, negó que lo fuera: «No es soberbia, sino supervivencia. Llevo casi seis años con este asunto».

De Guindos ignora las acusaciones y Báñez niega cualquier injerencia

«Lo único importante es que hoy Bankia es seguramente el banco más solvente de España. Tiene una gestión profesional que está produciendo y ha producido ya muchos resultados. Ustedes comparen». Así respondió De Guindos, sin nombrar a Rato, a las críticas que le hizo su antiguo jefe durante el Gobierno de Aznar. Aseguró que no quería alimentar «ningún tipo de debate ni polémica». Por su parte, la responsable de Empleo, Fátima Báñez, negó injerencias del Gobierno en la situación procesal de Rato.